Yamaha quiere dar un salto. De las dos ruedas de sus motos va a pasar a las cuatro de un coche eléctrico que es muy parecido al MOTIV que nos presentaron en el Salón del Automóvil de Tokio. Se llama MOTIV.e y ha sido creado en colaboración con Gordon Murray, un hombre muy experimentado que ha querido formar parte de este proyecto urbanita.
Es muy parecido al Smart fortwo y también guarda cierta similitud con el Toyota iQ. Tan solo mide 2,69 metros de longitud, 1,47 metros de anchura y 1,48 metros de altura, lo que le hacer ser especialmente apetecible en ciudad.
No necesita demasiada potencia
Su motor eléctrico ha sido desarrollado por ZyTek y se encarga de mover las ruedas del eje trasero. Lo hace entregando una potencia máxima de 25kW, que vienen a ser unos 34 CV. La potencia constante es de 15 kW (unos 20 CV). Son cifras muy reducidas, es verdad, pero también hay que decir que es tremendamente ligero. Solo pesa 730 kilos, así que no hace falta un motor de 70 CV para moverlo.
Autonomía pensada para la ciudad
El inversor pesa 7,5 kilos, la transmisión 11 y el motor 13. La batería de iones de litio tiene una capacidad de 8,8 kWh, de los que se pueden utilizar 7,2 kWh. Gracias a ello Yamaha asegura que podrá alcanzar los 105 km/h de velocidad punta y recorrer hasta 100 millas (unos 160 kilómetros) sin detenerse. A la hora de cargarlo se podrá emplear una toma de electricidad convencional empleando unas tres horas, mientras que con una toma especial de carga rápida ese tiempo se reduce a una hora.
Tanto el MOTIV como el MOTIV.e se empezarán a fabricar en 2019. El MOTIV se moverá con un propulsor tricilíndrico de un litro y una potencia de entre 70 y 80 CV. Podrá acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 10 segundos, ya que su peso es inferior a los 700 kilos (es, lógicamente, más ligero que el MOTIV.e).