El súper fabricante germano está tocando todas las teclas en el tema de la conectividad coche y teléfono. Por un lado se ha unido a la alianza Open Automotive, donde están metidos los constructores con más tirada de ventas, y se pretende trabajar codo con codo junto a Google para que las consolas de información y entretenimiento de los vehículos sean unas Android idénticas a tu teléfono.
Por otro lado, también tiene pactos de colaboración con Apple, que está trabajando en lo mismo: el CarPlay, cuando esté terminado, hará que en el salpicadero del vehículo tengas otro Mac como el que ya tienes en casa o un iPhone como el que ya llevas en el bolsillo.
Pero no puede quedar nada fuera del tintero; Volkswagen ha abierto su propio centro de investigación y desarrollo en una jugada brillante: el Volkswagen Infotainment GmbH. Y para ello lo único que ha necesitado es comprarle a Blackberry sus instalaciones alemanas, sitas en Bochum.
¿Qué fue de BlackBerry?
La empresa canadiense en su día fue diosa y creadora de los smartphones, y compartió el Olimpo con Nokia. Ambas parecen haber caído en desgracia delante de los sistemas Android y Apple. Nokia intenta salir del paso usando en sus terminales el Windows Mobile de Microsoft, y BlackBerry se ha enrocado en desarrollar su propio sistema operativo.
La gracia del asunto es que los teléfonos que BlackBerry lanzó el año pasado funcionan sobre un –por así decirlo– ‘tuning’ del lenguaje de programación Unix. Pero Unix es lo que se emplea para los iPhone y los Android. El aspecto es diferente, la publicidad es la que pone un precio, pero son la misma cosa envuelta en distinto papel de regalo.
BlackBerry ha ido cerrando plantas y relocalizándose, dejando un largo rastro de titulares funestos en periódicos de economía, donde se habla de pérdidas y más pérdidas. Pero no significa que BlackBerry haya muerto, porque sí ha logrado que las aplicaciones más comunes, como el Facebook, el Whatsapp, el Twitter o el Youtube estén gratis dentro de sus terminales más populares. Ya lo he dicho antes: en el corazón de la bestia corre la misma sangre que en un iPhone o un Android; adaptar las aplicaciones tiene coste cero.
En España BlackBerry ha desaparecido, pero, por si alguien se lo pregunta, resulta que España no es el centro sobre el cual gira el resto del universo. BlackBerry está sumando más y más usuarios entre el 2013 y el 2014. ¿De dónde son estos nuevos fans de la resurrección BlackBerry? Latinoamérica.
Coches del futuro
Hablemos de coches: los mercados que aún hemos de asfixiar a base de vehículos y productos tecnológicos inservibles no están en Europa. Y tampoco se limitan a Asia. América Central y América del Sur son otro punto estratégico para todos los fabricantes. Hasta la fecha, eran el patio de recreo de GM o Ford, pero el grupo VAG, los coreanos, Renault, PSA y los japoneses están entrando duro.
Y hablemos del futuro: imaginemos el Golf generación X. El que se venda en España vendrá de serie con Android, ya que la inversión en desarrollo habrá sido harto más barata. Por un poco más de dinero, podrás cambiar la consola y el ordenador de abordo por el sistema CarPlay de Apple.
Pero el Golf que se venda en México o en Chile, si la tendencia sigue como en los dos últimos años, equipará el sistema BlackBerry, cuya patente y adaptación para coche será propiedad de Volkswagen. Y si otra marca quiere incluirlo en su catálogo, irá pagando unos euros a Volkswagen por cada coche que venda.
La jugada puede salir así, pero si BlackBerry finalmente quiebra, los alemanes únicamente reconvertirán las instalaciones recién adquiridas en una máquina de 10.000 personas programando Android, Apple, Windows o lo que se esté vendiendo más.