Qué decir de Volkswagen que no se haya dicho ya. La firma alemana no solo es líder de ventas en su país, sino que en otros mercados, como por ejemplo el español, también está por delante del resto. Y eso que no es una de las marcas que vende los coches más baratos. Su posición intermedia entre generalista y premium le ha valido para ganarse un reputación que pocos le discuten a día de hoy.
Gran inversión en I+D
Lo que tampoco se les puede discutir es que a día de hoy son líderes en tecnologías de propulsión innovadoras. No lo digo yo, lo dice el CAM (Center of Automotive Management). El Grupo Volkswagen, haciendo caso de las palabras de su presidente, ha ampliado su liderazgo respecto al año pasado en este apartado:
La innovación es la clave para una movilidad sostenible.
Martin Winterkorn, CEO de Volkswagen AG
La eficiencia y la sostenibilidad son los pilares básicos en los que se apoya la estrategia de Volkswagen. Quieren rebajar al máximo las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera, pero tampoco olvidan lo importante que es reducir los consumos para que sus clientes estén contentos. Por eso hay 40.000 personas que se dedican única y exclusivamente al área de I+D en todo el mundo.
Mínimas emisiones
En la gama de modelos del Grupo Volkswagen podemos encontrar un total de 302 variantes con emisiones de dióxido de carbono que están por debajo de los 120 gramos por kilómetro recorrido. Además, 50 de esos modelos pueden presumir de estar por debajo de los 100 gramos por kilometro recorrido. Es lo que se consigue siendo el mayor inversor en I+D del sector privado, algo que se ha constatado tras un elaborado estudio publicado por la Comisión Europea.
Los eléctricos y el gas natural ganan peso
El futuro de Volkswagen avanza hacia la electrificación de su flota (véanse los últimos e-Golf y e-Up!). Cada vez hay más versiones que funcionan con gas natural y los motores diesel y gasolina se optimizan cada año para alcanzar los mayores niveles de eficiencia posibles. Es una inversión inteligente para cubrir las necesidades de un mercado que se mueve lento, pero con paso firme, hacia un modelo de movilidad más sostenible. Por eso se les ocurrió lo del Think Blue.