En enero os hablé por primera vez del Lykan Hypersport, el coche más caro del mundo. Fabricado por W Motors, una empresa con sede en Beirut (Líbano), presume de exclusividad y de un precio prohibitivo, ya que por él hay que pagar la nada despreciable cifra de 3,4 millones de dólares, que al cambio actual son unos 2,5 millones de euros.
En septiembre se esperaban las primeras unidades, pero lo cierto es que todavía no hay rastro de él. Y que conste que no lo digo porque me esperara ver una unidad por mi barrio… Tan optimista no soy.
Nuevo material para contemplarlo
Lo que sí podemos ver es un nuevo vídeo y una galería de imágenes que nos lo muestran desde todos los ángulos. A partir de ahí cada uno puede opinar lo que le dé la gana sobre su peculiar diseño. Te puede gustar más o menos, pero lo que no se puede negar es su deportividad. De hecho, tiene como un extra de mala leche que hace que puedas tener pesadillas después de verlo por el retrovisor.
Un superdeportivo con cara y ojos
Lo que nadie puede discutir es su capacidad para volar bajo. Su motor de seis cilindros bóxer con doble turboalimentación se encargará de hacer las delicias de los siete afortunados que se lo podrán comprar. Entrega 760 CV y 1.000 Nm de par máximo para pasar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos hasta alcanzar una velocidad punta de 390 km/h.
Las primeras imágenes que vimos de él nos mostraban una carrocería de color blanco que no le sentaba nada mal. Ahora, sin embargo, también podemos ver cómo le sienta el negro mate. Una señal de que el proyecto sigue vivo para fortuna de los jeques árabes que se apuntarán a la lista de espera.
