El pasado viernes os mostré un Audi R8 V10 atractivo y hoy es el turno de hablar de un Audi R8 V10 Plus explosivo. ¿Por qué? Pues porque entrega nada más y nada menos que 2.200 CV de potencia.
La idea ha sido de la gente de Underground Racing, que a la hora de añadir potencia a los superdeportivos que pasan por sus manos pierden la cabeza por completo. Su objetivo suele ser el de estirar al máximo las posibilidades de modelos de marcas como Lamborghini o Ferrari, así que no son nuevos en esta clase de majaderías.
El R8 más monstruoso que puedes conducir
Los de Carolina del Norte nos han impresionado con un trabajo que se divide en seis etapas que modifican el comportamiento del motor 5.2 litros V10 atmosférico, que es el que viene de serie con unas cifras que no son nada despreciables: 610 CV y 560 Nm.
El primer kit de potenciación, el más básico de todos, alarga su potencia hasta los 800 CV. Luego pasamos a los 900 CV con gasolina de competición y un escalón por encima están los 850 CV con gasolina de 93 octanos y 1.000 CV con combustible de carreras.
La cosa se pone seria cuando supera con creces la barrera de los 1.000 para entregar 1.250 CV, algo que al cliente le cuesta 99.000 dólares. ¿Por qué tanto dinero? Pues porque no solo se trata de añadir turbos, sino que requiere una serie de modificaciones del propulsor que Underground Racing no ha querido desvelar para que la competencia no tome nota.
Las dos opciones más radicales son la Race Version TT y la X Version TT. La primera de ellas entrega 1.150 CV con gasolina normal y 1.500 CV con gasolina de competición, mientras que la segunda escala hasta los 1.200 CV con gasolina normal y 2.200 CV con gasolina de competición. Una burrada, vamos.
Para terminar, decir que no se sabe nada sobre las prestaciones que alcanza con cada etapa. Deben ser escandalosas.