Juntos son más fuertes. Lo saben todos los fabricantes del sector de la automoción, que con la crisis tuvieron que limar asperezas para sobrevivir.
Uno de los acuerdos más importantes que se cerró fue el que firmaron Toyota y los dos integrantes del grupo PSA, Peugeot y Citroën. Hasta ahora nos habían demostrado de lo que eran capaces con el parto de un utilitario que tuvo trillizos. Me refiero a los Toyota Aygo, Citroën C1 y Peugeot 108. En esta ocasión toca hablar de un vehículo comercial que recorrerá muchas ciudades europeas con un chasis prácticamente calcado.
Preparados para Ginebra
Si no pasa nada raro, durante el primer semestre de 2016 asistiremos a la comercialización de los Peugeot Traveller, Toyota Proace y Citroën SpaceTourer. Todos ellos serán presentados en el Salón del Automóvil de Ginebra que se celebrará en marzo del año que viene.
Se respira buen ambiente
Patrice Lucas, director de Programas y Estrategia de PSA Peugeot Citroën, está convencido de que todas las partes implicadas en su desarrollo saldrán ganando:
Estamos encantados de presentar hoy estos tres nuevos vehículos, fruto de la cooperación entre Toyota Motor Europe y PSA Peugeot Citroën. Este acuerdo nos ha permitido desarrollar una nueva plataforma eficiente, para ofrecer a nuestros clientes en todo el mundo productos modernos y particularmente competitivos en su segmento.
Lo mismo opina Johan van Zyl, Presidente y CEO de Toyota Motor Europe, que está satisfecho con el trabajo llevado a cabo de forma conjunta desde que empezaron a colaborar en 2012. La nueva generación del Proace, que por cierto empezó a parecerse a los Peugeot Expert y Citroën Jumpy en 2013, tiene todos los ingredientes para triunfar, incluido el diseño.
El acuerdo que firmaron en su día no expira hasta el 2020, y es probable que decidan ampliarlo si los resultados que obtienen son positivos. Ahorrar costes y fabricar vehículos cada vez más atractivos y eficientes es la meta de cualquier marca que pretende hacerse un hueco en los segmentos más competidos del mercado.