Se suele decir que lo que funciona es mejor no tocarlo. Y Toyota es el principal fabricante de coches del segmento C en todo el mundo, de modo que algo están haciendo bien hasta la fecha. Aún así, se han liado la manta a la cabeza y han radicalizado el Auris como nadie hubiera apostado que harían. Se presentará a finales de septiembre, por eso lo llaman Auris 2012, aunque hay dudas de que en la planta del Reino Unido donde se fabricará se consigan hacer suficientes unidades como para comercializarlo a finales de año. De ser así, el coche llegará en el primer trimestre del año próximo, con lo que sería más adecuado llamarlo Auris 2013.
Ya fue un cambio radical el salto entre el último Corolla y el primer Auris para los acérrimos a la marca, pero esto es un triple mortal con tirabuzón. Y es que el diseño se ha vuelto mucho más agresivo. Es consecuente con el cambio radical que también experimentó el último Yaris con respecto a su generación anterior. El nuevo compacto de Toyota se acerca un poco al diseño L-Finesse que usan en Lexus, aunque lo amolda para darle un carácter propio.
Será mucho más dinámico y menos “vehículo de transporte”, porque, para empezar, las suspensiones traseras serán multibrazo, eliminando por fin el eje de torsión. Recordemos que en actual Auris este moderno sistema de suspensión sólo estaba presente en la ya derrengada versión de 177 CV diesel. También tendrá un centro de gravedad mucho más aplomado (es cinco centímetros y medio más bajo que el actual) y un mejor coeficiente aerodinámico.
De simpático a cara de malas pulgas
Su cara de bonachón ha sido borrada de un plumazo. En el frontal, combina el estilo de diseño de la parrilla inferior Under Priority (‘Prioridad inferior’) con el concepto Keen Look (‘Imagen Sofisticada’) de los faros y las luces de circulación diurna LED. Si el actual Auris recuerda a un simpático cetáceo, el nuevo parece más un felino.
Pero es en la trasera donde más osadía han puesto. Es realmente bonito, sobre todo por el diseño del parachoques tan elevado, que de alguna manera me recuerda al estilo del Opel Astra.
Se lanzarán al mismo tiempo dos motores diesel, dos gasolina y el híbrido HSD. Los propulsores ya son conocidos: 1.4 y 2.0 en diesel, y 1.33 VVT-i y 1.6 VVT-i en el lado de la gasolina. Estarán revisados en emisiones y potencia, pero la palma se la llevará el híbrido, que será el más potente de todos. Para Toyota, la hibridación ya no es un nicho, sino una opción más. Y con su Auris quieren que sea la más deseada. Pocos detalles más tenemos día de hoy, pero auguro que este modelo nos va a dar para unos cuantos artículos más en un futuro próximo.