La chismografía sobre este prototipo exhibido en la primavera del 2015 se reaviva con un vídeo del coche lijando los neumáticos en un circuito. Los alemanes con bandera checa hicieron un ensayo muy decorativo con algún Audi R8 de la primera generación que debía andar acumulando polvo en los almacenes de una fábrica. Ahora lo tienen expuesto como cosa muy fantástica en un museo de arte moderno, y dice la prensa británica que en el 2016 fabricarán 24 iguales a 225.000 € cada uno.
Una mezcla peculiar
El Skoda R200 tiene un aire de persona volandera, que ha ido viajando de país en país sin echar raíz en lugar alguno. Hay algo de estadounidense de los años ochenta y de vehículo del Berlín Oriental de la Guerra Fría; el coche de un funcionario anónimo de la Stasi en 1950. Visto de atrás, da la impresión que el señor Petr Novàk ha sido más descuidado con su diseño y no se notan muchas diferencias con el R8.
Tracción trasera
A este Audi R8 Mk I le han eviscerado el motor de 8 cilindros en uve, 4.2 litros, 32 válvulas y 430 CV con cambio de marchas manual. Al bloque de la familia FSI le han retirado la tracción integral y se han perdido una porción de kilos en la báscula. Queda, pues, como una máquina con la fuerza en las ruedas traseras.
¿Demasiado caro?
Los opinadores están tomando sus posturas; unos extáticos y otros lanzando anatemas contra el R200. Esa parte de nuestro cráneo que no se distancia mucho de los reptiles empuja a muchos a las simplezas, y preguntan «¿pero qué clase de persona se compraría un Skoda por ese dinero?» No pienso que el pecunio sea algo en lo que meter la sonda; cada cual lo empleará como le convenga, y se tendrá por extravagante donar esa cantidad a una escuela lo mismo que dárselo a Skoda por un automóvil.
R200 en acción
El vídeo se filmó en Eslovaquia hace seis meses con la autoría de Hoffman&Novague, o eso se aprecia en los créditos de Vimeo, pero es ahora que la revista checa ‘Autoforum’ lo ha movido a YouTube, lugar en que se puede hacer un ruido que escuche más gente y darle un barniz de novedad. No hay rastro de qué productora y qué realizador se hicieron cargo de la grabación. Conociendo un poco de qué manera se manejan estos anuncios, está en lo posible que hacerles la pieza les dejase en bancarrota y desencuadernados. Para la materia que nos incumbe, aquí están las fotos y el vídeo.