Malas noticias las que nos llegan sobre el estado de salud de Michael Schumacher. El heptacampeón del mundo de Fórmula 1 sigue luchando por su vida y las cosas no van todo lo bien que podríamos esperar.
Meses después de sufrir el grave accidente esquiando experimentó una serie de progresos que nos hicieron creer en su recuperación, pero los comentarios más recientes no nos invitan a ser optimistas.
Se reduce la esperanza
Un neurocirujano cercano al entorno de Michael Schumacher ha hablado con un periodista de News Every Day, que es el portal que ha publicado sus declaraciones:
Schumi necesita ahora un milagro para seguir vivo.
Es una frase tan corta como contundente. Su vida pende de un hilo, algo que ya podíamos intuir el mes pasado cuando Sabine Kehm, la portavoz de la familia Schumacher, se pronunció sobre la situación del piloto alemán:
Sabemos que lo que ha pasado es algo que no podemos cambiar. Sólo podemos esperar que con paciencia y el apoyo de todos algún día Michael pueda estar nuevamente con nosotros
Desde diciembre de 2013 estamos pendientes de cualquier noticia con la esperanza de que se recupere. Sin embargo, en las últimas semanas ha empeorado y los más pesimistas ya se temen lo peor.
Jean-François Payen, el médico que le trató en Grenoble, pronosticó que se recuperaría tres años después del accidente. De momento lleva dos y medio y se multiplican los rumores que apuntan a que ha pasado de 75 kilos de peso a 45 por la pérdida de musculatura que ha experimentado. Además, también se ha dicho que los gastos médicos ascienden a 16 millones de euros.