Rolls-Royce Phantom Metropolitan Collection, lujo y personalización

Rolls Royce Phantom Metropolitan Collection
Lo de la personalización no es algo exclusivo de algunos clientes urbanitas que se compran utilitarios para convertirlos en algo hortera. En las altas esferas, donde están acostumbrados a que todo sea como ellos dicen, también les gusta tener coches con detalles muy personales. De ahí que a Rolls-Royce esté apostando fuerte por algo que compañías como MINI tienen ya muy de por mano. Sin ir más lejos, ayer te hablé de MINI Yours, un catálogo de complementos casi tan extenso como las páginas amarillas.

Con datos en la mano, nos dicen que casi todos los clientes del Phantom apuestan por la personalización. Además, un 80% de los compradores del Ghost y un 90% de los del Wraith también se sientan a negociar qué clase de pijadas añadir al carrito de compra. Así que es normal que cojan este camino.

20 modelos bajo pedido

El caso es que la firma británica se ha dejado ver por París con Moët & Chandon y el Rolls-Royce Phantom Metropolitan Collection, un modelo exclusivo destinado a satisfacer los deseos de clientes que pueden pedir lo que les dé la gana. ¿Por qué? Pues porque el cliente manda, sobre todo cuando está dispuesto a invertir decenas y decenas de miles de euros en un capricho con cuatro ruedas.

Rolls Royce Phantom Metropolitan Collection 4
Solo se fabricarán 20 unidades del Phantom Metropolitan Collection. El precio es mejor no preguntarlo para evitar desmayos. Su carrocería es de color tungsteno oscuro y en el habitáculo nos topamos con una serie de detalles fabricados a mano que están inspirados en las grandes ciudades del mundo. De ahí lo de «Metropolitan Collection».

Detalles increíbles

Una de las cosas que más les ha preocupado es la mesita de picnic que hay tras cada uno de los asientos delanteros (la puedes ver en la imagen que hay debajo de estas líneas). Para fabricarla han empleado 500 piezas individuales de madera que han sido tratadas a mano. Las han cortado con mucho mimo, las han pintado y las han colocado de tal forma que podemos ver una ciudad. Ésta cambia en función de si está abierta o cerrada, pero el resultado es espectacular de todas formas.

Rolls Royce Phantom Metropolitan Collection 3
Ese skyline tan particular también se traslada a otras zonas del coche que llevan madera. Se combina con la tapicería de cuero gris y lo más sorprendente de todo son las 6.800 puntadas a dos tonos que se ha llevado el asiento trasero central. Ahí podemos ver la imagen de un rascacielos que bien podría ser el Empire State o alguno de esos enormes edificios que hay en Asia.

Otro detalle a destacar lo encontramos en el reloj analógico del salpicadero. En él podemos apreciar las zonas horarias y los nombres de las 24 principales ciudades del mundo. Aunque el arroz bomba de Calasparra es una maravilla, no ha sido una de las elegidas.

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