Ya está disponible el sedán compacto de Mercedes, el largamente anticipado CLA. Compartiendo motorizaciones con el hatchback Clase A del que deriva, Mercedes le ha cargado un suplemento de 5.000 euros más. Estos señores han de cambiar de camello inmediatamente, porque lo que están tomando les sienta fatal. Si recordáis el anuncio del CLA para la Super Bowl, allí se desvelaba que los precios americanos empezaban en los 22.000 euros. Dije en su momento que aquí sería más caro, pero me quedé muy, muy, pero que muy corto. Son 9.000 euros más que en los USA.
A falta de completarse la gama con 4MATIC y AMG, ahora mismo el CLA dispone de tres propulsores de gasolina (en una horquilla de los 122 a los 211 CV) y dos motores diesel (136 y 170 CV).
Menos el más pequeño, el CLA 180 BE con un corazón de 1.6 y 122 CV, los demás motores tienen su equivalente también en la Clase C. Y aquí es donde han perdido la cabeza. Por bonito, esperado y deseado que haya sido el CLA, al final nada ha cambiado en Mercedes y toda esa mascarada publicitaria se ha caído por su propio peso. Los CLA son más caros que los Clase C, siendo este último coche de una categoría superior.
Nuevos gadgets y nuevos diseños no justifican que cueste entre 200 y 500 euros más el coche pequeño que la berlina, sobre todo cuando la mecánica es la misma.
Listado de precios
– CLA 180 BE (122 CV): 31.500 €
– CLA 200 (156 CV): 33.800 €
– CLA 250 7G-DCT (211 CV): 42.700 €
– CLA 200 CDI (136 CV): 33.400 €
– CLA 220 CDI 7g-DCT (170 CV): 38.300 €
Al que no le incomode la aparatosidad de estos importes, aún puede seguir despilfarrando y añadirles los paquetes opcionales Urban y AGM Line. Podemos encontrar llantas de 18 pulgadas, trenes de rodaje confort o sport, diferentes salidas de escape, discos de frenos perforados, paragolpes, taloneras, faldones y detalles de acabado más deportivos o más señoriales en el interior, dependiendo de si te consideras una persona más “Urban” o más “AMG Line.”
