El futuro del tricampeón de MotoGP está en el aire. Jorge Lorenzo quería ampliar su compromiso con Yamaha antes de que arrancara la temporada, pero lo cierto es que todavía no ha llegado a un acuerdo con la firma japonesa, que por otra parte sí que ha convencido a Valentino Rossi. El italiano ha extendido su contrato dos años más, por lo que se acercará a las 40 primaveras cuando llegue la fecha en la que probablemente se bajará de la moto para siempre.
Arriesgar o no arriesgar, esa es la cuestión
Lorenzo sabe que en Yahama tiene muchas posibilidades de ser campeón, pero la oferta de Ducati le tienta. La firma italiana, que se beneficia de vivir bajo el paraguas del Grupo Volkswagen al ser una filial de Audi, puede ofrecerle una cantidad de dinero desorbitante para que cambie de máquina la temporada que viene.
Agostini habla de una oferta muy suculenta
Giacomo Agostini, un hombre con autorización para meter la nariz en los asuntos de Ducati, ha reconocido en una entrevista concedida a un medio de su país que le han puesto sobre la mesa muchos millones de euros para que abandone Yamaha. La última palabra la tendrá Lorenzo, que es feliz donde está a pesar de que su relación con Rossi no es la mejor por cómo terminó el pasado Mundial.
El propio Rossi duda que su compañero de escudería sea capaz de dar el salto a Ducati como hizo él en su día. Considera que para eso hay que ser valiente, ya que ficharía por un equipo que ahora mismo no está en condiciones de darle una moto ganadora. Textualmente, dijo que para aceptar la oferta era necesario «tener huevos».
Veremos qué es lo que sucede en los próximos meses. Lo que está claro es que saldrán a la luz mucho rumores sobre el futuro del piloto que ahora mismo lidera el Mundial de MotoGP tras la celebración del primer Gran Premio del Año, el de Catar.