Nueva normativa europea de seguridad, coches más seguros desde ya


Estas cosas avanzan poco a poco, más que nada porque cuando a los fabricantes se les aprietan las tuercas para que sus coches tengan dispositivos obligatorios de seguridad, enseguida empiezan las protestas y las amenazas con subidas de precios o movimientos de plantas de fabricación. Costó mucho tiempo llegar al ABS, pero se consiguió; la Comisión Europea va cumpliendo con su trabajo. Desde hace cinco días, ya está en vigor la nueva reglamentación que obliga a todos los fabricantes que quieran vender en Europa a instalar nuevos dispositivos en el equipamiento básico.

Es decir, cualquier coche que se homologue desde el 1 de noviembre de 2012 ha de cumplir con la nueva norma, y para el 2014 no se podrá vender ningún vehículo que no la cumpla. De modo que, en dos años, los vehículos que ya están homologados de antes de la reciente fecha, tendrán que instalar de serie algunas cosas más.

La Comisión Europea quiere que en el 2020 las víctimas por accidentes se reduzcan exactamente a la mitad en comparación con las del 2010 y esta nueva reglamentación es un paso importante para ello. Los nuevos requisitos están enfocados en dos direcciones: prevenir el accidente y, en caso de que ocurra, disminuir el riesgo de perder la vida. Colateralmente, veremos que también obligará a los fabricantes a facilitar el ahorro de combustible y rebajar las emisiones.

Los nuevos dispositivos obligatorios

Probablemente, la más notoria es la instalación del sistema de control de presión en los neumáticos. Además de afectar al consumo, un neumático con la presión errónea puede constituir un riesgo, un peligro que aumenta conforme la rueda tiene más kilómetros encima.

También se exigen anclajes más sencillos para los asientos infantiles (ISOFIX) y una mejor protección de los pasajeros contra el desplazamiento del equipaje en caso de colisión.

Algo que está bastante extendido pero que ya se ha institucionalizado como forzoso es el sistema de aviso visual o sonoro en caso de que el conductor no use el cinturón de seguridad. Este sistema no se puede desconectar y estará constantemente recordándole al piloto que debe ponérselo. La verdad es que aquí se demuestra lo lentos que vamos. Otros países como Australia ya lo tienen por obligatorio desde hace años.

También hay nuevos requisitos específicos para los vehículos eléctricos, y en los de combustión ahora hay que instalar el indicador de cambio de marcha recomendado a fin de ayudar a los conductores a ahorrarse unos litros de gasolina y bastantes gramos de CO2.

A mí me llama la atención que se haya quedado fuera de esta nueva normativa la instalación forzosa del aire acondicionado, cuando está demostrado que conducir con temperaturas elevadas dentro del habitáculo induce al sopor y al agotamiento. Es imperdonable que todavía se vendan coches en los que hay que pagarlo aparte.

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