Medio centenar de fiscales se han reunido en las Jornadas Anuales de Seguridad Vial para extraer una conclusión muy interesante. Según se ha comentado, aquellos conductores que no utilicen los cinturones de seguridad para proteger a un menor que viaja en el coche podrán ser acusados de delito de homicidio o lesiones, siempre y cuando el menor haya resultado herido o haya fallecido a causa de un accidente de tráfico.
En el caso de que las personas estén unidas al menor por lazos parentales y tuitivos, los incumplimientos detectados serán remitidos a la fiscal de Sala Coordinadora de Menores para que se aplique la ley orgánica de protección jurídica del menor. Según Bartolomé Vargas, coordinador de Seguridad Vial, el menor no tiene la capacidad de entender que tiene que utilizar el cinturón de seguridad para su bien, por lo que la responsabilidad recae inmediatamente en el adulto.
Una cifra es la que ha hecho saltar todas las alarmas. En 2008 fallecieron 76 menores en accidentes de tráfico, 40 de los cuales no llevaban puesto el sistema de retención adecuado. Además, las cifras de heridos graves son todavía más escandalosas, por lo que la medida que se quiere tomar me parece más que justificada.