¿Alguna vez has aparcado en un lago helado? Yo no, y no lo pienso hacer. Aunque la policía no te vaya a multar y la grúa pase de acceder al mismo por lo que pueda pasar, debes saber que las placas de hielo se pueden descongelar para ofrecerte una sorpresa desagradable. Es lo que sucedió en el lago Ginebra, en Wisconsin (Estados Unidos).
Aparcamiento gratuito con trampa
Los propietarios de los coches afectados no se lo pensaron demasiado a la hora de aparcar. Algunos tuvieron suerte y pudieron rescatar sus vehículos a tiempo, pero otros imagino que necesitaron la ayuda de los bomberos para salir de ahí.
Unos 15 coches quedaron atrapados a eso de las 14:00 horas, cuando el sol ya llevaba unas horas calentando lo que a las 8 de la mañana estaba totalmente congelado. La parte positiva es que no había nadie dentro de los mismos, así que no hay que lamentar víctimas.
Ahora les tocará pelearse con sus respectivas compañías de seguro, que no creo que estén por la labor de abonar las averías provocadas por la inundación. Aunque un seguro sea a todo riesgo, este tipo de incidentes pueden quedar fuera de las coberturas si se considera que los daños han ocurrido por negligencia del propietario.