La alianza entre Nissan-Renault y Acciona tiene muy buena pinta, pues los vehículos eléctricos se pueden ver beneficiados, esos que no emiten emisiones de CO2 a la atmósfera para frenar el cambio climático. Ayer, en una rueda de prensa preparada por las tres empresas, se conocieron datos muy interesantes. Son los siguientes:
– El 80% de los combustibles que se utilizan en el mundo son de origen fósil, lo que significa que provienen del carbón o del petróleo.
– La automoción es la culpable del 12% de las emisiones contaminantes que se encuentran en suspensión en la atmósfera.
– Un 80% de la población hace menos de 60 km cada día con el coche.
– Los postes de carga ofrecerán energía limpia, con una denominación que estará garantizada por el Ministerio de Industria.
– En 2020 los vehículos eléctricos tendrán un peso del 10% en el total de la producción mundial.
El problema es que el cambio no va a ser tan fácil como parece. Para que los vehículos eléctricos campen a sus anchas las ciudades tienen que estar preparadas, la gente tiene que estar concienciada acerca de su importancia y tienen que existir ayudas para fomentar la venta.
En la sede de Renault en Madrid se ha firmado un acuerdo de colaboración entre las tres empresas para la fabricación de vehículos eléctricos. Los postes de carga, lógicamente, correrán a cargo de Acciona, que será el principal proveedor para estas dos marcas. De esta forma podremos recargar el coche en cualquier lugar. La factura será enviada inmediatamente y no tendremos que preocuparnos de nada más. Quedarse tirado será prácticamente imposible.
Tanto Nissan como Renault harán todo lo posible para que la adaptación sea lo más fácil posible. Los navegadores incluirán información sobre los puntos de recarga en todas las ciudades y carreteras europeas, pudiéndose hacer una reserva de los postes públicos desde el mismo automóvil. Estos llegarán aproximadamente en 2011 y se basarán en el Renault Twizy, un prototipo de la firma francesa.
Las ciudades contarán con postes de recarga por doquier. Sin ir más lejos, Madrid tendrá unos quinientos puntos de recarga, todo ello sin contar las electro-gasolineras que están por llegar. El objetivo de Nissan-Renault es que la autonomía de los eléctricos que fabriquen sea de 160 km, más que suficiente para el día a día.