Muy pronto sabremos con qué fabricante correrá Jorge Lorenzo la temporada que viene. El piloto balear todavía no ha tomado una decisión en firme, pero es un secreto a voces que acabará fichando por Ducati.
El acuerdo alcanzado podría hacerse oficial entre Texas y Jerez, lejos de las cámaras que se mueven a pie de paddock. Los motivos de su «sí quiero» a la firma italiana son evidentes:
Cobrará más que en Yamaha
Lorenzo reconoció que Yamaha le había ofrecido la mayor cantidad de dinero que jamás han puesto sobre la mesa por él. Son 10 millones de euros por temporada muy tentadores, pero no están a la altura de los 12 kilos que puede llegar a pagar Ducati con el apoyo económico de Audi.
Se sentirá totalmente respaldado
En Yamaha no está saboreando sus mejores días. El enfrentamiento que se vivió la temporada pasada entre Valentino Rossi y Marc Márquez no le dejó en buen lugar, ya que a los integrantes de su equipo no les gustó que presentara un recurso ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) contra el italiano. En ese sentido considera que han apoyado más a Valentino.
Puede conseguir algo que Rossi no consiguió
Rossi fue muy valiente al fichar por Ducati, pero no fue capaz de conquistar el Mundial de MotoGP. Eso es precisamente lo que intentará Lorenzo con un equipo que solo ha sido campeón de la categoría gracias a Casey Stoner, que conquistó el título en 2007 y la última victoria en 2010. Rossi no ganó ni una sola carrera en sus dos temporadas en Ducati y solo logró subirse al podio en tres ocasiones. Parece que Lorenzo no tendrá demasiados problemas para mejorar sus registros.
Puede sumarse al club de los campeones en más de un equipo
Tan solo cinco pilotos han logrado proclamarse campeones de la categoría con dos equipos distintos. Me refiero a Geoff Duke (Norton y Gilera), Giacomo Agostini (MV Agusta y Yamaha), Eddie Lawson (Yamaha y Honda), Valentino Rossi (Honda y Yamaha) y Casey Stoner (Ducati y Honda). Si lo logra ampliará su leyenda.