Coches eléctricos o con pila de combustible, híbridos diésel, híbridos gasolina… Son muchas las opciones que existen a día de hoy para prescindir de un vehículo con motor de combustión, a pesar de que éstos siguen siendo los que más se venden con diferencia.
Mercedes-Benz, en su búsqueda insaciable de nuevos caminos que nos lleven a la movilidad sostenible, ha desarrollado el que dicen que es el primer eléctrico con pila de combustible. Se llama Mercedes-Benz GLC F-CELL, ha sido presentado como prototipo en el Salón de Frankfurt, y por lo visto contará con una versión de producción.
Solución al problema del tiempo que se invierte en recargar la batería
Se trata de un GLC muy especial, ya que se mueve gracias a un motor eléctrico de 200 CV y 350 Nm que se vale de la energía procedente de una batería para funcionar. Además, también incorpora la famosa pila de combustible de hidrógeno, por lo que su autonomía es de 486 kilómetros según el ciclo NEDC.
Los depósitos de hidrógeno, que tienen una capacidad de 4,4 kilos, son responsables de 437 kilómetros de esa autonomía. El resto se consiguen gracias a la energía eléctrica de la batería de iones de litio, cuya capacidad es de 13,8 kWh.
El hecho de que utilice pila de combustible hace que el repostaje no sea un quebradero de cabeza. En unos tres minutos puedes recuperar los 437 kilómetros de autonomía, una cifra que ni la batería con carga más rápida es capaz de alcanzar hoy en día. De hecho, pra cargar este GLC F-CELL al máximo hay que emplear una hora y media de recarga.
Hay tres modos de conducción que afectan al comportamiento del coche (ECO, COMFORT Y SPORT) y cuatro modos de servicio en los que varía la relación que existe entre la pila de combustible y la batería (HYBRID, F-CELL, BATTERY y CHARGE).
Hay que decir que Mercedes conoce bien el tema de la pila de combustible, ya que en 2010 lanzó el Clase B F-CELL en algunos países (a España no llegó). Respecto a aquel modelo, hay que decir que el GLC F-CELL tiene un sistema de pilas un 30% más compacto que va colocado en el capó y han utilizado un 90% menos de platino en la fabricación de la pila de combustible.
Preocupados por el suministro de hidrógeno
El principal problema lo van a tener con la escasez de hidrogeneras. De ahí que estén trabajando con H2 Mobility para crear nuevos puntos de servicio lo antes posible. De hecho, planean llegar a las 100 estaciones en Alemania en 2018 y a las 400 en 2023.