Como ya ha ocurrido en anteriores ediciones, el CES 2015 que se celebra en Las Vegas vuelve a ser un lugar ideal para los fabricantes de coches que trabajan por desarrollar la movilidad del futuro. Uno de ellos es Mercedes-Benz, que para la ocasión ha presentado el F 015 Luxury in motion, un prototipo que no solo llama la atención por sus formas, sino que también lo hace por el aprovechamiento del espacio interior y el triunfo de la conducción autónoma.
Espacio por todas partes
Mide 5,22 metros de largo, 2,01 metros de ancho y 1,52 metros de alto. La distancia entre ejes es de 3,61 metros, así que estamos hablando de una cota que es 45 centímetros más generosa que la del Mercedes-Benz Clase S de batalla larga. Eso, sin duda alguna, va en favor del espacio disponible en los cuatro asientos individuales que lo componen. Éstos se pueden colocar enfrentados para mantener una conversación, jugar o trabajar con toda la comodidad del mundo. Además, son capaces de girarse 30 grados hacia el exterior para que sea más fácil abandonar el habitáculo.
Detalles estéticos
A nivel estético llama la atención por los módulos LED que incorpora tanto en el frontal como en la zaga. Con ellos ilumina la carretera, pero también nos muestra el modo de conducción seleccionado (azul si es autónomo y blanco si es manual). No hay montante central, las ventanillas y las lunas son opacas y las puertas traseras son de apertura inversa.
Siempre comunicado con el entorno
Una de sus grandes virtudes tiene que ver con la facilidad para comunicarse con los peatones y otros vehículos que circulan a escasos metros de distancia. Puede emitir destellos para iluminar una persona que está cruzando justo por delante y puede hacer lo mismo utilizando la parte trasera para informar a los conductores que le preceden.
Electricidad y pila de combustible
La seguridad es uno de los puntos fuertes de este F 015 Luxury in motion que se mueve gracias a un sistema eléctrico apoyado por la pila de combustible. Dos motores eléctricos de 100 kW cada uno (136 CV) se encargan de mover las ruedas posteriores generando una potencia máxima de 200 kW (272 CV) y un par motor de 400 Nm, que evidentemente está disponible desde el primer acelerón.
Puede acelerar de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos y alcanzar una velocidad punta de 200 km/h. Su autonomía es de 1.100 kilómetros, 200 de los cuales se logran gracias a las baterías. Los 900 restantes corresponden a los depósitos de hidrógeno, que por cierto están fabricados con plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP). Consume 0,6 kilos de hidrógeno por cada 100 kilómetros recorridos, así que ronda los 2 l/100 km si lo comparamos con un diesel.
Rodeado de pantallas
No hay tiempo para el aburrimiento. En su interior los pasajeros perciben información de forma constante gracias a seis pantallas de alta resolución. Una está en el panel de instrumentos, otra en la parte trasera y las cuatro restantes en los paneles de las puertas. Materiales como el cuero y la madera de nogal se encargan de que se perciba un ambiente de calidad.
