Según True Car Inc., éste el coche más buscado en internet en noviembre y diciembre del 2014, cinco o seis meses antes de su lanzamiento.
Salido del chasis del Mazda2, un utilitario de comercialización programada como Generación IV para el primer trimestre del 2015. Técnicamente, el CX-3 es la tercera carrocería para el Mazda2, que desde el 2007 ha contado con un cuerpo hatchback o cinco puertas, y uno sedán que jamás ha pisado el mercado español. Esta morfología de cuatro puertas y maletero, sin embargo, ha sido popular en todos los países donde se ha conservado la nomenclatura japonesa original, Mazda Demio.
La reconversión a SUV o crossover –turismo de fisonomía todoterreno– responde a la corriente de influencia que estas versiones ejercen en las pesquisas de gente con intención de cambiar de coche, búsquedas que se hacen aunque sea por mera curiosidad.
Cruzando todos los datos estadísticos que acumula True Car Inc., ellos extrapolan que el CX-3 será un coche con altísimo impacto comercial en el 2015, cosa que dentro de Mazda significaría emparejarse a su compacto Mazda3.
Si esta empresa tiene razón y ha de ser el ‘coche del año’ 2015, aquí está todo lo que hace falta saber sobre el CX-3.
Empresa con sede en California que en diez años ha cambiado dos veces de nombre. Acumulan datos de vehículos en venta o de comercialización cercana. Clasifican el catálogo y las tarifas de todas las marcas, y miden cuántas veces la gente solicita información sobre cada coche. Incluso registran el flujo de ventas de vehículos de segunda mano.
Las estimaciones de mercado que llevan a cabo, por lo tanto, las tienen en cuenta concesionarios, importadores y exportadores.
El coche
El CX-3 es solamente algo más corto que un Mazda3, y más alto, por obvias necesidades de elevar la carrocería del suelo para salir del asfalto sin rascar los bajos. Compararlo con un Qashqai ayuda a hacerse una idea de las dimensiones del vehículo.
El Nissan es apenas 10 centímetros más alargado que el Mazda. Aún así, a los ojos de un ser humano, y aplicando el sentido común partiendo de las cotas de mediciones del habitáculo, Qashqai y CX-3 son de un tamaño casi exacto.
Por lo tanto, el formato del CX-3 es muy compatible con la vida en las ciudades de esta península, donde las anchuras de los parkings y zonas de estacionamiento de pago complican la existencia de mastodontes.
Si no se reequilibran ofertas de precios y he de lanzar una apuesta, diría que dentro de España el CX-3 fagocitará parte de los enamorados del Mazda3, a priori integrante de un segmento C, donde deberían ubicarse modelos de mayor envergadura.
Los utilitarios crecen tanto, sobre todo en estas mutaciones camperas, que las líneas fronterizas se borran. A resultas de esto, un CX-3 y un Mazda3 prácticamente son dos dardos para la misma diana.
SKYACTIV
Efectivamente, el elenco de motores proviene del Mazda2 y del Mazda3, todos y cada uno de ellos de la familia SKYACTIV. Un 1.5 gasolina, un 2.0 gasolina, y un 1.5 diesel. 100 CV, 120 CV y 150/160 CV (este último escalón de potencia por confirmar).
Tanto en gasolina como en gasoil existe la opción de cambio manual con seis marchas y de cambio automático de convertidor de par. Ambos sistemas se han estado sometiendo desde el 2012 a una dieta de adelgazamiento, de reducción de fricciones y a una reconfiguración de su electrónica, para llegar a ahorrar entre un 4 y un 7% de combustible en comparación con las versiones precedentes.
Sistemas de tracción
Los propulsores y las transmisiones dan la ambivalencia que necesita un SUV para ser un SUV; impulsión por las ruedas delanteras o tracción total. Ahí ya depende del presupuesto de cada cual y de si tiene intención de aventurarse más o menos en los caminos de tierra. O de si vive en algún punto geográfico que a menudo presenta condiciones meteorológicas delicadas para el agarre de un coche.
La tracción 4X4 es de reparto variable y gestionado por electrónica. La fuerza del motor se distribuye entre el eje delantero y el trasero según el programa de control de estabilidad detecte pérdidas de sustentación o deslizamientos.
Los sistemas de este tipo nunca responderán como una tracción simétrica de un todoterreno real, aunque sorprenderán a más de uno. Puedo dar fe de ello y lo atestigüé durante la prueba de conducción del Chevrolet Trax, que parte de un planteamiento similar.
Igual de importante que la motricidad de las cuatro ruedas serán –precisamente– las ruedas. Unos neumáticos mixtos para carretera y barro son el mejor garante de no quedarse atascado y de ser más consistente sobre superficies muy frías o con mucha agua.
Dotación más destacada
Una lámina de plástico encima del salpicadero proyecta información básica con tal de que la persona al volante no desvíe los ojos del parabrisas. Es una de las variantes más elementales de los sistemas Head-Up Display que están proliferando en la automoción.
Otro equipamiento de seguridad que Mazda trae al CX-3 desde otros modelos mayores de su inventario es la supervisión de entorno del coche por medio de sensores. A través de esto se controlan los cambios de carril accidentales, la proximidad de otros coches y de peatones o los sensores para aparcar.