Los japoneses se han metido entre ceja y ceja que hay que derribar a la Serie 3, la Clase C y los A4. La berlina pequeña de Lexus anuncia cambios hasta en el tuétano del coche. El diseño se va a hermanar un poco con la última actualización del buque insignia de la marca, el GS, pero va a ser mucho más deportivo y europeo, porque quieren meterse en el juego de tronos y no quedarse como una opción para minorías que detestan llevar el mismo coche que el vecino.
Saldrá a la venta en mayo del 2013 y cerrará el ciclo de la transformación: por fin Lexus tendrá toda su gama de modelos con opción híbrida. El motor diesel IS220d lo borrarán del mapa. Unos dirán que es una barbaridad, pero personalmente pienso que hay que tener arrestos para mirar tan de frente al siglo XXI. El motor híbrido será el 2.5 litros que se mostró recientemente en el concept LF-CC.
Lexus pretende derivar el chasis del nuevo IS en otras carrocerías, siempre con esa obsesión de darle en los morros a los alemanes. Habrá un coupé dos puertas para combatir contra el A5 y el Serie 3 Coupé. Esta versión pretenden enseñarla en el mes de marzo en el Salón de Ginebra. A pesar de todo, en Lexus dicen que no están los tiempos como para supermotorizar al IS y desafiar al M3 con un sucesor para el IS-F de 417 CV. Pero de momento no hay nada confirmado.
Lexus abrirá también una gama de acabados y equipamientos deportivos para el IS, de igual forma que BMW tiene sus M Sport Packs y Audi tiene su S-Line.
La cosa no queda ahí
Los planes de expansión de Lexus aún acaparan más enemigos que torpedear. Junto al nuevo IS saldrá un SUV más contenido que su gigantesco RX450h para enfrentarse al Audi Q5.
Lexus quiere un pedazo del pastel de los crossovers más pequeños, así que más adelante también llegará un enemigo para el BMW X3, que aún no tiene nombre. Los dos proyectos camperos, por descontado, contarán con la baza de tener una opción híbrida. Este último SUV más pequeño esperará al relevo del Toyota RAV4, cuya nueva generación ya está en el horno. Así aprovecharán las sinergias y compartirán plataformas, haciendo que el precio pueda ser competitivo.
Hablando de precios, Lexus no esconde que el nuevo IS o los SUV que le van a seguir siempre serán más caros que los alemanes, pero que su política es que los coches han de ir equipados hasta arriba con lo último de lo último. Por eso, a nada que te descuides configurando tu BMW con unos pocos packs opcionales, irás a parar al mismo precio que un Lexus.
Nuevamente, la jugosa noticia, las recreaciones por ordenador y las fotos espía de las pruebas que se están haciendo en Michigan son cortesía de los incombustibles de CarMagazine.