Porsche es una de las marcas que más champán puede descorchar tras un 2014 impecable. La firma alemana no deja de crecer y goza de una reputación excelente en todos los mercados donde opera. Y si a eso le sumamos la llega del Macan a su extensa gama, es normal que las ventas se hayan disparado considerablemente.
El SUV, hermano pequeño del Cayenne, se vende desde 63.694 euros en España, un precio que supera por poco al de las dos versiones más económicas de los deportivos más accesibles de Porsche, el Boxster y el Cayman. Eso ha empujado todavía más las ventas, ya que el 75% de los compradores de un Macan son nuevos clientes.
Crecimiento del 17,1%
En 2014, y por cuarto año consecutivo, pueden hablar de récord de ventas. En diciembre superaron la barrera de las 20.000 unidades vendidas (matricularon un 39% más que en el mismo periodo de 2013) y han terminado el año vendiendo con 189.849 unidades, un 17,1% más que en 2013, cuando entregaron 162.145.
En todos los mercados han crecido considerablemente, incluso en Europa. En el viejo continente han experimentado un crecimiento del 19,1% que se sitúa por encima de la media, siendo Alemania el principal mercado dentro del continente. En casa las ventas se han disparado un 15,5%.
En Estados Unidos pueden hablar de un 11,1% en verde, mientras que en América en general el resultado refleja un 12,6% positivo que se traduce en unos cuantos millones de euros más para sus arcas.
China es una mina
El mercado donde más ha crecido Porsche ha sido el chino. En el gigante asiático han vendido un 25,4% más al expedir 37.425 unidades en 2014, una cifra que es inferior a la registrada en Estados Unidos en valores absolutos. En territorio yanqui han vendido 47.007 unidades, una auténtica salvajada que en parte se explica por los precios (allí hay menos impuestos).