Al otro lado del charco el patriotismo no tiene límites. Nos lo ha demostrado el cliente de un Lamborghini Diablo SVR que ha decidido pintar su carrocería con los colores de la bandera de Estados Unidos.
Y digo yo… ¿por qué no lo hace con un Ford Mustang o con un Chevrolet Camaro? Entonces sí que sería un estadounidense auténtico.