La Dirección General de Tráfico quiere poner fin al #novullpagar. Desde ese organismo han querido dejar muy claro que todo el mundo tendrá que pasar por la piedra, que los catalanes tendrán que seguir pagando unos peajes abusivos de unas autopistas que ya han sido amortizadas sobradamente.
Como aquí más de uno chupa del bote, no parece que nada vaya a cambiar. Hay demasiados intereses y quienes mandan son quienes perciben ese dinero que sale del bolsillo de todos los españoles.
El caso es que quieren evitar líos con las concesionarias de autopistas de peaje. Por eso han establecido un protocolo de actuación que deberán seguir los agentes que realicen su servicio en este tipo de vías.
Protocolo a seguir por los trabajadores
1- Avisar de que se está incumpliendo el artículo 153 o bien del artículo 132.1 (obediencia de las señales, concretamente de la de obligación de detención).
2- Si el conductor no se baja del burro y entorpece el tráfico se incumple el artículo 2, el de fluidez del tráfico. En cualquier caso son sanciones leves, de 100 euros (50 euros con bonificación). Si el conductor abandonara el vehículo en el peaje estaríamos hablando de estacionamiento indebido y se multaría con 200 euros (infracción grave).
3- Se recomienda acompañar la denuncia con una «prueba gráfica de la matrícula del vehículo» y con «la indicación de la identidad de otra persona que hubiera presenciado los hechos» para que haya un testigo.
Además, a los agentes se les ha dado la orden de que tramiten estas multas de forma prioritaria. Eso significa que las multas por no pagar peajes llegarán a los domicilios de los infractores muy pronto.
Así las cosas, queda bastante claro que la batalla la ganarán los de siempre. Tocará ir por la Nacional tragándose colas interminables o pagar religiosamente lo que cuesta recorrer algunas carreteras que deberían ser gratuitas (o como mínimo a un precio razonable). Yo de momento he optado por la vía de no regalarles ni un sólo euro a todos los ladrones que viven una vida de lujo gracias a estos peajes. El resto de españoles sí que tenemos que sudar mucho para ganar dinero.