Se nota que el Hyundai Tucson no es un modelo cualquiera. Lo están vendiendo con una facilidad increíble y es por ello que los surcoreanos han centrado todos sus esfuerzos en lanzar un restyling en condiciones, mejorando lo que se podía mejorar y sin tocar lo que está funcionando a las mil maravillas, como por ejemplo su diseño.
Eso significa que los principales cambios se dejan ver en los motores, en las cajas de cambio y en el equipamiento, que ahora es más generoso que nunca e incluye elementos que denotan que Hyundai tiene poco que envidiar a las marcas premium en determinados aspectos.
Ligeros cambios para ponerse al día
Han rediseñado los pilotos, los faros son full LED y vemos cambios tanto en los paragolpes como en el portón trasero. Además, hay hasta 11 colores a elegir para la carrocería y cuatro diseños para unas llantas de aleación que pueden ser de 16, 17, 18 y 19 pulgadas.
Sus 4,48 metros de longitud dan para mucho. Eso se nota en el habitáculo, que ahora incluye materiales y acabados de más calidad, además de una pantalla flotante de 8 pulgadas que pertenece al sistema multimedia.
El maletero es de los más generosos de su segmento, ya que estamos hablando de 513 litros que se pueden ampliar a 1.503 si se abaten los asientos de la fila trasera.
Motores
En lo que a motorizaciones se refiere, la más modesta de todas está formada por un bloque 1.6 GDi de 132 CV que funciona asociada a una caja de cambios manual. No pasa lo mismo con el motor gasolina que está justo por encima, un 1.6 T-GDI de 177 CV que puede montar una transmisión manual de seis velocidades o automática de doble embrague y siete relaciones. Además, este último puede ser 4×2 o 4×4.
El único motor diésel que sobrevive es un 1.6 CRDi Smartstream, un turbodiésel disponible en dos niveles de potencia: 115 y 136 CV. Sea cual sea la elección, la tracción siempre es delantera.
Hay que volver a hablar de los gasolina para referirse al motor más potente de toda la gama, un 2.0 CRDi de 185 CV, que tiene algo de híbrido gracias a una red de 48V que permite aportar 12 kW de potencia adicional en determinadas situaciones. La tracción en este caso es siempre 4×4 y solo hay una transmisión disponible: automática de doble embrague y ocho velocidades.
La tecnología microhíbida que proporciona la red de 48V también llegará al motor 1.6 CRDi de 136 CV en 2019.
Precios
Termino comentando que hay cuatro niveles de equipamiento disponibles (Essence, Klass, Tecno y Style) y que parte desde los 25.415 euros, una cifra que no tiene nada que ver con lo que cuesta el Hyundai Tucson CRDi 2.0 185 CV 48V 4X4 AT Tecno, que es el tope de gama y cuesta no menos de 41.265 euros.