Todos los motores con gasoleo se van a ir marchando de Honda a la francesa, sin despedirse. Los bloques i-DTEC, de 1.6 L. y de 2.2 L., son los clasificados internamente como gama ‘N’. Antes de ellos, Honda estaba en tratos con General Motors y con Isuzu para que les suministraran bloques diésel. Pero los i-DTEC están desarrollados enteramente por Honda, desde los bocetos hasta la manufactura.
El 1.6 i-DTEC nos consta desde el 2012; cuatro cilindros, turbocompresor, filtro antipartículas de tipo DPF y sistema de parada y arranque automático. En marzo de 2018, al alimón con el encuentro automovilístico de Ginebra, Honda le injerta al Civic 2017 la última revisión de este impulsor. Honda dice que no va a seguir adelante con el diésel en Europa… Por ahora.
El mejor Civic que se ha conocido
El Civic X es el mejor Civic, visto al menos con ojos de quien lo ha ido seguido desde hace veinticinco años. Desempeño, estímulos sensoriales para los conductores y dote no han estado antes tan bien encontrados. La silueta exterior y el habitáculo es cuestión de preferencias personales y de actitudes; nosotros estamos más en el lado que opina que Honda pone un grano de distinción en cada uno de sus productos.
El décimo Civic se vende en nuestro continente con cinco puertas y con cuatro, bajo los nombres de Hatchback y Sedán. Desterrado, pues, el cuerpo familiar con maletero extra grande. En gasolina hay tres estratos de potencia: 129 CV, 182 CV y 320 CV. El más nervudo está reservado sólo a la categoría ‘Type R’, que viene nada más con la forma de dos volúmenes.
El entrecomillado último diésel de Honda se plantea para las dos morfologías del carrozado, aunque el sedán está diferido a junio de 2018.
La versión más ahorradora
120 CV desplazan el Civic X menos potente, pero también el menos bebedor. La ficha técnica hace constar 3,5 litros cada cien kilómetros con el cinco puertas, y 3,4 en el sedán. Este consumo, claro está, sale de un cálculo mixto entre ciudad y carretera y es bajo las pruebas de la marca. Las personas que lo adquieran percibirán, lo más probable, que los números suben un litro más.
Con todo, son guarismos aceptables en este momento tecnológico. Las emisiones confesadas también por la marca son de 91 a 93 gramos de CO2 por kilómetro, según carrocería y cambio. Esta transmisión, por cierto, puede ser manual con seis velocidades y, desde septiembre de 2018, automática CVT, que simula nueve posiciones, como si hubiera nueve marchas.
Los paquetes de acabados siguen inmóviles: Comfort, Elegance y Executive, con la posibilidad de una suspensión adaptativa en el escalón más alto. Sin embargo, para el gasoil no hay terminaciones Sport, ni Sport Plus ni Prestige.
Precios para España
En España, en Hatchback, los precios sin descuentos basculan de 23.550 € a 29.650 €. Por lo que afecta al sedán, estos números se mueven de 24.850 € a 29.950 €.