Todavía estamos muy consternados por la muerte de Marco Simoncelli, un piloto que debutaba en MotoGP la pasada temporada y que no lo hacía exento de problemas. Sufrió varias caídas y en algunas involucró a pilotos como Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo, quienes siempre le recriminaron su comportamiento en la pista. Sin embargo, hoy todo son palabras de apoyo para la familia porque nos ha dejado para siempre.
Una desgracia
Nadie quería que sucediera algo como lo que ha sucedido en la segunda vuelta del Gran Premio de Malasia en Sepang. Una desafortunada caída le ha costado la vida porque Colin Edwards y Valentino Rossi le han pasado por encima.
Simoncelli dio el salto a la máxima categoría del motociclismo mundial después de proclamarse campeón del mundo de 250cc. Lo logró después de acabar tercero en Malasia, precisamente el mismo lugar donde hoy ha perdido la vida.
Marco era un tipo muy peculiar. Siempre estaba sonriendo, no dejaba indiferente a nadie. En la pista era muy ambicioso y agresivo, pero fuera de ella se le recuerda como un tipo afable, educado y simpático. Se le consideró durante mucho tiempo el heredero de Valentino Rossi, algo de lo que intentó huir constantemente. No le gustaban las comparaciones y respetaba mucho al más grande de MotoGP.
Todos le vamos a recordar siempre como un gran piloto y una gran persona. El paddock y el mundo entero llora su muerte, una más en un deporte muy peligroso.