Lío al canto el que se veían venir muchos cuando Ferrari presentó su nuevo modelo de competición bautizado como Ferrari F150. Resulta que desde hace ya un buen puñado de años Ford comercializa una pick-up muy popular cuyo nombre es F-150. ¿Qué ha sucedido? Pues que la firma americana no ha tenido más remedio que denunciar a la italiana por copiar el nombre.
El plagio es más que evidente, pues los nombres sólo difieren por el guión que sí aparece en el modelo de Ford. Según el acusado, este hecho supone un daño en sus intereses y en la demanda se pide explícitamente a Ferrari que no utilice ese nombre en Estados Unidos.
Ferrari ya ha respondido a estas acusaciones. Lo que harán será utilizar el nombre completo del modelo: Ferrari F150th Italia. Además, no entienden la denúncia, pues según ellos no tiene nada que ver un modelo de calle con un modelo de competición, no afecta en lo más mínimo. La confusión no afecta en ese sentido. Por último, subrayan que el nombre de todos sus modelos siguen una conexión histórica que en este caso tiene que ver con el 150 aniversario de la unificación de Italia.
El juez que instruye el caso tendrá la última palabra…