En siete días, doce millones de humanos han visto el mensaje al espacio del Hyundai Genesis, o eso me marca ahora el indicador de visitas en la plataforma YouTube.
En lo que cuenta esta superposición entre la publicidad y el documental, Stephanie es una muchacha de Houston, en Norteamérica. ‘Steph’ tiene a su padre en la Estación Espacial Internacional, y no le ve por meses. Le piden que dibuje la señal del corazón, la que hacemos a modo de decir ‘te quiero’ sin hablar cuando estamos impedidos de ello, o cuando no nos entendemos en el idioma.
Con once coches, e infiero que con muchas semanas para buscar el sitio perfecto, un equipo de técnicos de varias layas de la ciencia y el cine, dibuja el trazo de ‘Steph’ a un tamaño tan elefantiásico que puede ser mirado desde la ISS, el puesto de investigación que orbita en el espacio.
Es, como mínimo, imprudente escribir una ejecutoria sobre esto. Espectáculo de vaciedad o prodigio, todo va en opiniones. Pero desde mi ventana, si querían enseñarme algo sugestivo, lo han hecho. Me gusten o no los coches de Hyundai. Tenga estimación por eso que dicen ‘viralización’ de vídeos o no la tenga.
Aquí dejo la filmación y un ‘Cómo se hizo’ que, al contrario de inclinarme hacia algo que se acerque a una opinión, aún me trae más preguntas. Lo único que está en mi mano es cavilar.
SEGUIR LEYENDO «El Mensaje al Espacio de Hyundai, emulando las Líneas de Nazca»