El que puedes ver en las imágenes no es un coche cualquiera. Es un todoterreno bestial en todos los sentidos que no descuida el lujo gracias al buen hacer de Maybach, que cuando decide hacer algo siempre busca la perfección.
Del Mercedes-Maybach G 650 Landaulet se han vendido 99 unidades de las 100 anunciadas, así que todo el mundo se ha preguntado por el destino de la que no ha sido puesto a la venta. Lo que han hecho ha sido subastarla vía Bonhams para que algún rico perdiera la cabeza.
Subastado por una buena causa
No sabemos quién se ha hecho con dicha unidad, pero sí sabemos que es un belga al que no le ha importado pagar casi el doble de lo que han pedido por las 99 unidades vendidas. Por 1,2 millones de euros se lo ha llevado a casa, y lo mejor de todo es que el dinero irá a parar a la fundación Laureus Sport for Good de la que Daimler es socio.
Todo a lo grande
La máquina en cuestión mide 5,34 metros de longitud y monta un motor brutal. Es un V12 biturbo de 6.0 litros que entrega 630 CV y 1.000 Nm de par máximo, cifras espectaculares que sin embargo no le permiten ofrecer unas grandes prestaciones en lo que a velocidad punta se refiere. De hecho, no pasa de los 180 km/h, una velocidad máxima que se reduce drásticamente si se circula en modo descapotable: 96 km/h. Lo que sí es destacable es que puede acelerar de 0 a 100 km/h en 5 segundos con todo lo que pesa.
Echando un vistazo a su equipamiento, es imposible hacerle ascos porque incorpora los asientos traseros del Clase S (térmicos, con función masaje, reclinables…) y el habitáculo está tapizado en cuero. Las llantas de aleación son de 22 pulgadas, la altura libre al suelo es de 45 centímetros y no le faltan detalles de mucha categoría como los posavasos térmicos o las dos pantallas de diez pulgadas incrustadas en la parte trasera de los asientos delanteros.
