Pasean ya algunos renders del Twingo generación tres, en concreto de su versión más deportiva, la Renault Sport o RS. En comparación con el actual, se especula que pasaremos de los 133 CV a los 160 CV y que, por descabellado que parezca, el motor será un tres cilindros en V turboalimentado de tan sólo 900 cm cúbicos. El colmo de los colmos es que el bloque térmico irá debajo del maletero, igual que sucederá en su prometida versión eléctrica.
Para la versión normal del Twingo, con cinco puertas, el propulsor será el mismo pero con un turbo más pequeño, con unos sobradísimos 98 CV. Razonemos por un momento: los que están divulgando la información NO confirmada por los blogs hablan de un peso de 950 kilos. Sea como sea, cualquier versión me parece sobrepotenciada si lo que buscan es el mínimo consumo.
Se habla también de un diseño que cruza los concepts Twin-Z y Twin’Run. De ser así, el otro gran rumor sobre la resurrección de Renault 5 se desmontaría. Aquí no hay nada confirmado, estamos jugando a la prensa rosa.
Los frutos de la alianza
Lo que sí está confirmado es que el Twingo ha de ser hijo de la alianza firmada entre Daimler (Mercedes-Benz) y Renault-Nissan. Un juego de intercambios de acciones de prestidigitador, demasiado complejo para que me ponga a explicarlo. En resumen: en el 2010 Daimler se quedó el 3% de Renault-Nissan, y cada una de las otras dos marcas se hizo con el 1,5% de Daimler.
Los planes eran ambiciosos y luego se incluyó a Ford para la búsqueda de una pila de combustible nueva. Pero eso es otra historia para más adelante. Ahora que se cumplen los tres años de la unión de fuerzas, los primeros frutos ya están en la calle, en forma de vehículos comerciales de Mercedes (Citan, basada en la Kangoo) y en forma de motores Renault para el nuevo Clase A.
En concreto, el CDI 180 A Blue Efficiency con 109 CV es el famoso 1.5 dCI salido de Valladolid. Cuando uno compara el precio de un Mégane equipado hasta los dientes y un Clase A pelado y con el mismo motor (20.000€ contra 27.000 €), no sé si hay algo que tenga sentido en este mundo.
El Twingo se levantará sobre un chasis y un motor desarrollado conjuntamente entre los tres amigos, y que en Daimler tomará la forma de Smart ForTwo y Smart ForFour. Tras varios planteamientos estratégicos, parece que todos terminarán por fabricarse en la planta de Renault en Eslovenia.
Las cartas están echadas para el primer trimestre del 2014. Veremos más adelante si todo esto es un gran bulo o si se cumplen los auspicios.