Porsche sabía lo que estaba haciendo cuando se puso a diseñar un SUV con ganas de comerse el mundo. El Cayenne está muy bien y triunfó en países como España justo antes de que estallara la burbuja inmobiliaria, pero les hacía falta lanzar un SUV con un formato más reducido para enganchar a todos aquellos clientes que quieren conducir un Porsche sin gastarse los 77.000 euros que cuesta la versión más económica del hermano mayor del Porsche Macan.
Ha sido llegar y triunfar
Su llegada ha confirmado las previsiones de la compañía, e incluso podríamos decir que ha mejorado los pronósticos más optimistas. De los 225.121 Porsche que se vendieron en todo el mundo a lo largo de 2015, el Macan fue capaz de matricular más de 80.000 unidades, superando así al Cayenne, que con sus 73.119 tampoco se quedó corto.
Los SUV tiran del carro
Eso significa que el segmento SUV es crucial en la estrategia de la firma alemana con sede en Stuttgart. Estamos hablando de casi un 70% de las ventas globales entre los dos modelos, así que eso de promocionar el 911 y compañía está muy bien, pero a la hora de la verdad los que multiplican los beneficios de Porsche son los que no están preparados para dar la talla en los circuitos.
El nuevo Macan de cuatro cilindros mejorará los resultados
Se nota que el Macan está viviendo su etapa dorada aportando nuevos clientes que han decidido invertir sus ahorros en un coche que está por encima de las propuestas de Audi, Mercedes-Benz y BMW. Y encima lo mejor está por llegar, ya que la versión de acceso, la que monta un motor de 2.0 litros y cuatro cilindros, aterriza en junio en mercados como el español a un precio atractivo.
Nuevas generaciones del Cayenne y el Panamera a la vista
El Cayenne, sin embargo, lleva cinco años con la segunda generación (el último restyling es de 2014), así que no deberíamos esperar mucho para asistir al nacimiento de la tercera generación, que seguro que volverá a repetir el éxito de las anteriores.
Para terminar, decir que los resultados de la compañía, que por cierto arrojaron un importante beneficio gracias a un incremento del 19% de las ventas, seguirán creciendo cuanto el Porsche Panamera de segunda generación vea la luz, algo que se producirá este mismo año.