El Honda CR-V se pone al día con ligeros cambios estéticos, un interior de mayor calidad y una oferta mecánica más eficiente con la llegada de un nuevo propulsor 1.6 diésel de 160 CV y una caja de cambios automática con nueve velocidades.
Este restyling, que llegará a los concesionarios en la primavera de 2015, dota al CR-V de un diseño exterior más moderno y deportivo. La parte delantera estrena faros más alargados que convergen con la nueva parrilla. El paragolpes también ha sido rediseñado y le confiere un aspecto más bajo y ancho. En la zaga, los nuevos pilotos LED multifunción reafirman la modernidad del conjunto.
Novedades en el interior
En el interior los cambios más significativos son el nuevo reposabrazos central deslizante, que otorga una mayor versatilidad y comodidad, y la inserción cromada que recorre el ancho del salpicadero. Asimismo, la calidad y textura de los materiales utilizados es mayor.
El SUV japonés también recibe mejoras tecnológicas, incorpora de serie el nuevo sistema de infoentretenimiento Honda Connect. El CR-V cuenta con una pantalla táctil de siete pulgadas desde la que se podrán manejar una gran variedad de funciones, como la información del vehículo, el acceso a Internet, la cámara de visión trasera o la música. Además dispone de conectividad Bluetooth y MirrorLink, un sistema que te permitirá, entre otras cosas, configurar diferentes aspectos del CR-V mediante las aplicaciones para Smartphone disponibles en el Honda App Center.
Motores más eficientes
En el apartado mecánico, el nuevo CR-V incorpora el bloque diésel de cuatro cilindros 1.6 i-DTEC que rinde 160 CV y 350 Nm de par y todo ello con unas emisiones de 130 g/km en la versión con cambio manual y de 135 g/km para el modelo automático. Este propulsor sustituirá al actual 2.2 i-DTEC de 150 CV. Con este nuevo motor, se incrementan las prestaciones, y a su vez, se baja el consumo y las emisiones, un aspecto necesario para cumplir con la Euro 6.
El bloque 1.6 i-DTEC estará disponible únicamente para la versión de tracción total 4WD, la cual podrá equipar una caja de cambios manual de seis velocidades, o la nueva caja de cambios automática de nueve velocidades, más eficaz y eficiente (hasta un 20% más) que la anterior de cinco velocidades.
El CR-V 2015 seguirá estando disponible con tracción delantera. En este caso equipa la caja de cambios manual como única opción y se conservan los propulsores 1.6 i-DTEC diésel de 120 CV (que reduce sus emisiones a 115 g/km) y 2.0 i-VTEC gasolina con 155 CV.