La disposición de todos los documentos necesarios para la conducción de un automóvil es importante no solo a la hora de detenernos ante los agentes de la autoridad, sino que también lo es ante una situación accidentada, tal y como establece el artículo 59.2 de la Ley de Seguridad Vial. Ante cualquier circunstancia que pueda someternos a una posible sanción económica, lo mejor es mantener todos los comprobantes actualizados y siempre a mano. ¿Qué documentación es la obligatoria para nuestro vehículo?
Carnet de conducir
Es el documento más importante y a la vez el más demandado bajo un control policial, ya que dependiendo del segmento del vehículo, acredita la autoridad y las aptitudes legales que están sujetas a la conducción del coche, camión o motocicleta. No llevar el permiso de conducción puede suponer una multa de 10 €, con algún dato desactualizado asciende a los 60 €, y quien lo lleve caducado de hasta 200 €. En este caso puede ser sustituido por una Autorización Provisional expedida por la Jefatura de Tráfico de nuestra provincia o también por el justificante del gestor administrativo. Recuerda que actualmente ha entrado en vigor el Carnet de Conducir Europeo, el cual permite circular libremente por todos los países del viejo continente.
Tarjeta de Inspección Técnica o ITV
Es un documento expedido por el Ministerio de Industria cuyo objetivo es informar sobre las actualizaciones técnicas realizadas en nuestro coche, en consideración a un buen mantenimiento del mismo. Este registro se representa de dos formas obligatorias:
Como pegatina: ésta informa de la fecha en la que debe realizarse la próxima inspección técnica y suele colocarse en el parabrisas del automóvil.
Como documento: Según la normativa europea y el Real Decreto 2042/1.994, este documento en tamaño A4 (folio normal) suele ser de color verde y recauda todos los datos específicos sobre las inspecciones técnicas realizadas hasta la fecha. En este caso, circular con la tarjeta ITV caducada o desactualizada puede suponer una multa de 450 euros.
La póliza del seguro
Aunque realmente no es obligatorio llevarlo encima, este documento es muy atendido por las autoridades pertinentes. Su resguardo demuestra que el seguro obligatorio de nuestro vehículo se encuentra totalmente al corriente de pago y bajo facturación (y protección) de la empresa aseguradora.