Esta semana, la comandancia local de Fronteras situada en Algeciras, (donde 196.000 automóviles de Europa embarcan cada año con destino a costas marroquíes), informó a medios nacionales que los agentes del CNP recuperaron hasta 347 vehículos robados en 2013, un 40% más que en 2011, entre los que abundan marcas alemanas y de gama alta como BMW y Mercedes-Benz. A menudo, los conductores españoles somos demasiado incautos e inocentes a la hora de abandonar por un rato nuestros coches, algo que llama la atención de ladrones profesionales.
Salir a quitar una publicidad que alguien dejó en la ventana trasera del automóvil, abandonar el coche para comprar «solo un momento» tabaco en el estanco, recoger desconocidos en la carretera, aparcar en zonas totalmente oscuras y sin tránsito de personas… estos son algunos de los descuidos más comunes que pueden desembocar en robos. Sabiendo esto, hoy vamos a revelar algunos buenos consejos para impedir (en la medida de lo posible) que se lleven tu coche.
1.- En caso de no poseer plaza de garaje y si aparcas tu coche en la calle, además de estacionar en algún lugar visible, transitado e iluminado, es bueno implantar un sistema antirrobo que bloquee el volante, son baratos y muy útiles. Cualquier ladrón sabe que solo dispone de segundos para efectuar el robo, por lo que no puede perder el tiempo intentando quitar semejante elemento.
2.- Siempre que salgas del automóvil, ya sea para quitar publicidad de los limpiaparabrisas, (sobre todo de la parte trasera, algo que ha trae más de un disgusto) o para comprar cualquier cosa aunque sea durante unos segundos, asegúrate de apagar el motor del coche, retirar las llaves del contacto, bloquear la dirección y cerrar con llave.
3.- Al cerrar con llave, no lo hagas apretando el botón del mando a distancia, ya que algunos ladrones profesionales son capaces de copiar el código de tu llave y hacer un duplicado de la misma en cuestión de segundos. No importa el coche que tengas, sigue este consejo en lugares muy transitados porque son los más frecuentados para esta clase de artimañas. ¿Qué lugares transitados son los más peligrosos? Siempre que abandones tu coche en centros comerciales, estaciones de tren o aeropuertos no está de más que estaciones lo más cerca posible de la entrada a los mismos, donde abundan cámaras de vigilancia o donde se encuentran los cuartelillos de los agentes de seguridad.
4.- Nunca dejes a la vista de los viandantes objetos que llamen la atención, como bolsos, carteras, aparatos electrónicos o elementos de marcas caras.
5.- No recojas nunca a desconocidos en la carretera. Es uno de los métodos más comunes que utilizan los ladrones de coches.
6.- Si estacionas tu coche en un parking subterráneo o en el exterior de un centro comercial, jamás dejes el ticket en el interior del automóvil. Esto facilita y mucho que cualquier ladrón lo aleje de las instalaciones sin que nadie pueda sospechar que lo está robando.
7.- Un consejo importante. Muchos ladrones están al tanto de los coches estacionados en calles determinadas, apuntan las matrículas y pasan haciendo lo mismo toda la semana. Si un coche no se ha movido de su sitio durante algunos días, es muy probable que intenten llevárselo de allí. Si te vas de vacaciones no dudes en dejar a un amigo los papeles necesarios y las llaves para que lo cambie de lugar al menos un par de veces durante la semana, es lo más seguro.
8.- Si tu coche tiene instaladas llantas de aleación demasiado caras, no viene mal aumentar la seguridad de las mismas poniéndole unos tornillos de seguridad disuasorios. Se comercializan en packs de cuatro o cinco unidades y cuestan en torno a 30 euros. Pueden encontrarse en cualquier tienda para automóviles o mismamente en el concesionario.
9.- Últimamente se están dando algunos casos de robo con intimidación, por lo que es bueno acostumbrarse a conducir por ciudad con las ventanillas cerradas o dejando un pequeño hueco de dos dedos. También debes conducir con las puertas del automóvil bloqueadas, sobre todo si llevas pasajeros menores de edad. De este modo puedes evitar que, en la parada de un semáforo, alguien meta la mano para robarte algo o meterte en una situación peor.
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