A principios del 2013 los franceses ponen en circulación el primer DS descapotable. Habría que matizar que por “descapotable”, en este nuevo DS3 sólo se refieren a un techo de lona que se retira en tres posiciones distintas. Lo han hecho al más puro Fiat 500C. Del precio no han dicho nada, pero mil y pico euros de más no se los va a quitar nadie.
Vaya por delante que esto me suena a C3 Pluriel, y aquello fue un auténtico desaguisado. No se vendió ni a patadas, y los pocos que se lo compraron no tardaron en darse cuenta de su error, con filtraciones al interior del habitáculo por todas partes y ruidos y vibraciones más propias de un tractor. La carrocería y el sistema de descapotado era una chapuza.
Si la gama DS se las da de premium, mucho han tenido que mejorar esto. En Citroën dicen que sí, y que incluso se puede cambiar la configuración del techo a 120 Km/h, cosa inaudita en un descapotable. Y la apertura o cierre completo se hace en 16 segundos.
El coche con este sistema pierde 40 litros de maletero y se queda en 245 litros que no dan precisamente para hacerse la Ruta 66 con todo el equipaje que necesitas. Lo que sí han mantenido es la capacidad de personalización. Lo cierto es que yo ya me pierdo un poco con tantos opcionales. Sea como sea, además de todo lo que se puede elegir dentro del DS3 normal, en el descapotable estarán disponibles tres colores diferente para la capota de lona: negro, azul y gris Graphique DS.
Por fuera no cambia nada si no tenemos en cuenta la capota. La única diferencia es el rediseño de las luces posteriores. Y al interior le han incluido unos diodos para iluminación ambiental. Muy zen.