A finales de 2016 estará entre nosotros. El Chevrolet Camaro ZL1 tiene ganas de demostrar por qué es el Camaro más potente y rápido de la historia. Se ha adueñado de las mejores características de la sexta generación para convertirse en un pony car capaz de pasarle la mano por la cara a los de su categoría, incluido el Ford Mustang Shelby GT350, que al comparar datos de prestaciones sale bastante mal parado.
Transmisión de diez velocidades en opción
Bajo el capó del Camaro ZL1 de nueva hornada se esconde un motor V8 LT4 de 6.2 litros sobrealimentado por compresor para generar 640 CV de potencia y un par máximo de 868 Nm. De serie viene equipado con una caja de cambios manual de seis velocidades, pero es posible pedir una sorprendente transmisión automática de diez relaciones. Como puedes imaginar, ha sido desarrollada para dar la talla en los circuitos, que es donde todo propietario debería exprimir las virtudes de esta musculosa criatura.
Sus enormes llantas de aleación de 20 pulgadas impresionan a cualquiera, lo mismo que sucede con sus cuatro salidas de escape redondeadas (dos a cada lado). Los neumáticos son unos Goodyear Eagle F1 Supercar de 305/30 ZR20, mientras que el sistema de frenos Brembo lleva unos discos delanteros de 390 mm preparados para ser mordidos por unas pinzas de freno de seis pistones delante y cuatro detrás que a nivel estético pasan desapercibidas, pero a la hora de la verdad destacan por encima de otras piezas.
Habitáculo sport y suspensión magnética
En el interior encontramos lo que cualquiera puede esperar de un Chevrolet Camaro ZL1. Me refiero a unos asientos deportivos Recaro y un volante achatado por la parte inferior que viene forrado en Alcántara. Además, el sistema multimedia es de lo más completo, aunque no es la característica que más debería preocupar a un futuro comprador.
Lo que sí preocupa es el tema de la suspensión, que al ser Magnetic Ride se adapta al estado del asfalto en tiempo real para tranquilidad del conductor, que se puede valer de un selector para elegir el modo de conducción que más le conviene en cada momento.
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