No os engañéis por la baja calidad de la foto de portada (no hemos encontrado otra mejor); la tecnología avanza imparablemente en todos los ámbitos de nuestra vida. Continuamente nos vemos rodeados, qué digo, bombardeados por imágenes de todo tipo, aparatos tecnológicos, gadgets… Cada día vivimos más en una sociedad de la imagen, o al menos eso es lo que parecen querer decirnos los chicos de Barely Legal, que han diseñado un coche que en vez servir para desplazarse, sirve para ver videos de Youtube: el CarTube. Nunca mejor dicho, ver para creer.
YouTube fue creado por tres antiguos empleados de PayPal en febrero de 2005, pero Google Inc. compró la patente por 1650 millones de dólares en 2006. Actualmente su poder es tal que es objeto de parodias y experimentos tan curiosos como el que protagonizan los chicos de Barely Political. Éstos han querido mostrar al mundo el hasta ahora inexplorado territorio del automóvil al servicio de YouTube y el gran mercado interactivo que rodea el sistema de entretenimiento del mismo. ¿Adiós a los cassettes en el salpicadero? Quien sabe…
¿Vehículo o sistema multimedia?
No, ahora en serio. El CarTube, como lo han bautizado, es un vehículo de casi 3 millones de dólares con el que se desea concienciar al ciudadano de la escasa seguridad que pueden ofrecer los sistemas multimedia en los parabrisas.
Ya sabemos lo que les puede suceder a las personas que conducen operando con sus teléfonos móviles, y las consecuencias trágicas que ello supone… Existen muchos estudios sobre la conducción distraída que demuestran el peligroso uso de dispositivos digitales en el salpicadero, y la solución obvia, que es la tecnología controlada por voz, también puede ser más peligroso de lo que pensábamos. No queremos ni pensar lo que pasaría si este YouTube Car se comercializara.
Las imágenes del vídeo muestran ejemplos de distracción comunes como una mujer pintándose los labios durante la conducción, pero también tan absurdos como un hombre jugándosela en carretera mientras habla por Webcam.