La tecnología aplicada a la seguridad en los trenes y aviones se implantará muy pronto en los vehículos convencionales. Las cajas negras permitirán determinar con exactitud las causas que provocan los accidentes de tráfico y de esta manera prevenir y reducir el número de siniestros en carretera.
Los primeros modelos de cajas negras para vehículos, comenzaron a venderse en 2012 como un suplemento más de cara a la seguridad del conductor. Ahora, tanto dentro como fuera de España, son muchos los propietarios que graban con cámaras a través del parabrisas todas sus maniobras al volante. No obstante, las cajas negras para automóviles harán eso y mucho más.
Actualmente, existen dos prototipos de cajas negras para el vehículo; las individuales y las implantadas de serie. Estas últimas son las que vienen ya instaladas en los propios vehículos, una práctica adaptada a más del 90% de los coches fabricados en Estados Unidos en 2013. Esta fórmula puede acarrear problemas legales sobre el derecho a la intimidad, el control de la información registrada o quién (además del propietario del coche) posee acceso externo a las grabaciones.
Sin embargo, las cajas negras individuales son completamente manejables, pudiendo configurar el tiempo de grabación de forma manual o automática.
¿Qué hacen las cajas negras?
Junto con la cámara instalada sobre el salpicadero (o en el espejo retrovisor) las cajas negras son capaces de proteger toda la información registrada en caso de accidente. Están equipadas con un sistema que reconoce nuestra posición GPS en Google Maps, un giroscopio que mide las aceleraciones del vehículo, tacógrafo digital y un disco duro envuelto en aluminio y titanio capaz de soportar más de 3.000 Gs de presión. También es capaz de diagnosticar averías de forma remota, hacer un seguimiento a nuestra conducción para rebajar la prima al buen automovilista, y elaborar un gráfico de los 30 segundos anteriores al accidente, mientras él mismo avisa a las autoridades.
Tres de los modelos de cajas negras más comunes son el «Road Eyes Cams«, con varias fases de seguridad dependiendo del modelo, el «Car Angel BBX1«, quizás el más famoso y económico de todos, y la fabricada por alumnos españoles de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UPV/EHU, llamada «Indenor«.
¿Qué marcas de vehículos piensan en incorporar cajas negras?
Fabricantes como Volkswagen, Toyota o General Motors, han informado que las cajas negras pueden ser un elemento de gran valor para la seguridad del conductor. Sin embargo, en caso de ser implementadas de serie en sus vehículos, sus estrictas políticas de privacidad asegurarían la propiedad de la información registrada al propietario del producto.
De momento, las cajas negras para vehículos son una opción de seguridad que ronda los 300 euros la unidad.