BMW ha decidido dejar de fabricar motores diésel V8 por dos razones de peso. Una tiene que ver con la reducción del consumo de carburante, algo que preocupa mucho a sus clientes después de que el precio siga subiendo y no parezca tener techo. La otra está relacionada con el medio ambiente, puesto que no quieren dañar tanto a la atmósfera con las elevadas emisiones de dióxido de carbono que suelen emitir los coches que fabrican. Sin duda, la problemática del cambio climático está siendo muy respetada por las principales firmas automovilísticas.
Las versiones que actualmente cuentan con un motor diésel V8 continuarán vendiéndose de la misma manera hasta que se terminen las existencias. Por eso no hay que preocuparse. No sucederá lo mismo con las próximas generaciones de vehículos, que dejarán de contar con este motor diésel de ocho cilindros para tener que conformarse con uno de 4 o de 6. BMW considera suficientes esos dos motores gracias a la potente tecnología con la que cuentan hoy en día sus propulsores.
El downsizing está cada vez de moda y lo veremos en los próximos años, cuando se presentarán propulsores con menores cilindradas sin que ello perjudique a las prestaciones.
que es un motor v8?¿