Jeep, como ya están haciendo muchos fabricantes, ha decidido dar un paso al frente en lo que a la electrificación de su catálogo se refiere. En su hoja de ruta figuran hasta cuatro modelos eléctricos que deberían llegar a Europa y Estados Unidos en 2025 a más tardar, mientras que para 2030 pretenden que todos los concesionarios de la marca solo exhiban coches eléctricos tras las cristaleras.
De momento ya sabemos que el primero en llegar es un SUV llamado Avenger que aterrizará el año que viene, que hereda el nombre del Dodge Avenger que FCA estuvo vendiendo durante algún tiempo. Eso sí, no será tan espartano y poco agraciado como la berlina compacta mencionada, sino que tendrá un diseño atractivo y robusto para convencer a quienes todavía consideran que comprarse un coche es la mejor opción de movilidad.
Se fabricará en Polonia
Para empezar, podemos decir que los operarios de la planta de producción Stellantis en Tychy (Polonia) serán los encargados de darle forma. Allí se siguen fabricando modelos como el FIAT 500, el FIAT Panda o el Lancia Ypsilon, todos ellos de reducidas dimensiones.
Autonomía desvelada
Por ahora no sabemos qué potencia ofrecerán sus motores y qué batería montará, pero lo que sí han facilitado es un dato muy interesante sobre su autonomía: 400 kilómetros. Eso, haciendo algunos cálculos, nos permite intuir que la batería podría ser de 60 kWh de capacidad.
Presentación inminente
El SUV en cuestión será presentado en el Salón del Automóvil de París que se celebrará en octubre, mientras que su comercialización está programada para 2023 en territorio europeo. Su precio es una incógnita, pero se supone que dentro de lo que cabe no será un modelo excesivamente caro. Será un SUV compacto sin aspiraciones de competir con modelos premium, así que tal vez tendrá como competidores al Hyundai Kona electric o al Peugeot e-2008.