Creo que nunca he visto algo parecido. Es muy difícil tener la suerte y los reflejos que tuvo el autobusero que veréis en el vídeo que se muestra al final de esta entrada, todo un héroe por méritos propios.
El hombre, que por cierto se llama Mao Zhihao y vive en Jiangshan (China), tuvo la mala suerte de presenciar en vivo y en directo el accidente de un coche que se llevó una farola por delante para transportarla hasta el otro lado de la mediana, por donde circulaba con toda la tranquilidad del mundo para completar su recorrido diario.
No son campeones del mundo de ping-pong por casualidad
Lo peor de todo es que esa farola entró por el cristal como si fuera un dardo, atravesándolo con una facilidad pasmosa y estrellándose contra el asiento del conductor. Lo que parecía la crónica de una muerte anunciada se convirtió en un milagro, ya que Mao pudo esquivarla a tiempo con unos reflejos de otra galaxia y salió prácticamente ileso. Pudo atender al resto de pasajeros y a la policía como si no le pasara nada, pero ahora mismo se encuentra hospitalizado recuperándose de las heridas que sufrió en el bazo.
¿No deberían levantar un monumento en su honor? Yo si fuera el alcalde de Jiangshan como mínimo lo sometería a votación.