No es un chismorreo. Es una afirmación de las que suele soltar de vez en cuando Andy Palmer, el mandamás de Aston Martin.
Veníamos hablando de una posibilidad que con el paso de los tiempos ha ido cogiendo fuerza. Me refiero a la de fabricar un crossover que finalmente verá la luz en 2020, un año después de que arranque su producción.
¿Eléctrico 100% británico? Hay dudas
Se moverá gracias a la electricidad almacenada en una batería y está por ver si se llamará Aston Martin DBX, que es el nombre que utilizaron añadiendo «Concept» para enseñar sus cartas de presentación en el pasado Salón de Ginebra.
También es una incógnita saber si se fabricará en el Reino Unido. Palmer quiere que siga siendo así porque piensa que es un factor que atrae a sus clientes, pero como todo hombre de negocios hará lo que sea más rentable para la empresa:
Es la gran pregunta. El lugar de su fabricación dependerá de las subvenciones y los costes logísticos. Estoy obligado a financiar el programa como es debido. Ojalá toda la producción de Aston Martin se quede en el Reino Unido, pero eso es algo que no puedo garantizar en estos momentos.
De Gaydon a Alemania
Teniendo en cuenta la alianza con Daimler, es probable que algunas piezas se fabriquen en otros países como Alemania. De hecho, usar la tecnología AMG implicaría llevarse la producción fuera, así que estaremos pendientes de lo que sucede con el primer eléctrico de Aston Martin, que también podría ser el primero en fabricarse lejos de casa.
Tomarán nota de lo que pase con el Bentayga
Para terminar, decir que les va a venir muy bien saber cómo se comportan las ventas del Bentley Bentayga a la hora de fijar un precio para su DBX eléctrico. Estamos hablando de diseños y motorizaciones distintas, pero el público objetivo es bastante parecido en cuanto a nivel adquisitivo se refiere. Por eso van a esperar un poco antes de anunciar el precio de un nuevo modelo que todavía queda lejos.