La cuarta generación del Opel Zafira ha empezado a fabricarse en la factoría de Rüsselsheim, justo donde la compañía alemana tiene su sede. Allí han acudido el presidente y consejero delegado del Grupo Opel, el Dr. Karl-Thomas Neumann, el vicepresidente de Manufacturas, Phil Kienle, y el director de la planta, Michael Lewald. Todos ellos están convencidos de que el nuevo monovolumen será un éxito de ventas pese al auge de las carrocerías SUV, que son en gran parte las culpables de que algunos monovolúmenes hayan pasado a mejor vida en los últimos años.
Un Zafira vistoso para la foto
El Zafira que puedes ver en la imagen es el de nueva hornada. Es la primera unidad que han fabricado y como era de esperar no es una unidad cualquiera. Para salir más guapos en la foto han optado por un Zafira teñido de Rojo Magma con el paquete OPC Line. La estampa, no cabe duda, recuerda a la de los anuncios que se suelen preparar con la unidad más llamativa acompañada del pecio más bajo, que ni por asomo se corresponde a la del modelo en cuestión. Son las clásicas fullerías legales a las que se aferran todos los fabricantes para vender más.
Con este nuevo Zafira se actualiza el catálogo de Opel, que en lo que va de año es la marca que más coches ha vendido en España. Por ahora han logrado arrebatarle el trono a Volkswagen, que con el escándalo de las emisiones ha perdido algo de fuerza y debe conformarse con la segunda posición. Es, además, uno de los 29 modelos de nueva factura que pretenden lanzar entre este 2016 y 2020.
No quiero terminar sin antes recordar que esta nueva generación se beneficia de los sistemas multimedia IntelliLink compatibles con Apple CarPlay y Android Auto, de OnStar con punto de acceso WiFi 4G/LTE, o del sistema integrado de transporte de bicicletas FlexFix®. Con esos y otros argumentos pretenden engordar la cifra de algo más de 2,7 millones de ventas que acumula este «clásico» desde 1999.