Del Abarth 500 ya se han hecho algunas series limitadas y siempre con amplias posibilidades de personalización, como el 500 Vita, del que se hicieron 25 unidades mano a mano con Sony y que celebraba la llegada de la videoconsola PS Vita. También existe la serie 695 tributo Ferrari y la RT3 Rally. Pero lo que veremos en el Salón de París va mucho más allá. Veámoslo de más cerca.
Esto es más una nueva generación que una nueva edición. El Abarth 500 eroga de serie 135 CV, y si se le añade el sobrecoste del kit Esseesse, que puede ir de los 3.000 euros hasta los 5.000 de la serie 695 Brembo, la potencia sube hasta los 160 CV. Estamos hablando de un vehículo que comparte plataforma con el Ford Ka, de modo que las cifras son como para echarse a temblar.
El Fuori Serie sale de la base de la mencionada serie 695, la más prestigiosa de todas. Pero es totalmente personalizable. Y cuando decimos “totalmente” hay que subrayarlo y ponerlo en negrita. El cliente tendrá línea directa con los diseñadores, ingenieros y mecánicos de Abarth a la hora de ensamblar su unidad totalmente a su gusto personal.
Hay nuevos materiales y acabados, y también más colores. Pero la sustancia está dentro. El motor turboalimentado de cuatro cilindros y 1.368 cc está estrujado hasta los 180 CV y 250 Nm de par máximo. Casi nada. Su velocidad punta sube hasta los 225 km/h y detiene el crono en un 0 a 100 en 7 segundos. El consumo combinado es de aquellos que no se los cree ni el más ingenuo: 6,5 l/100 km. Sí, claro, y yo soy astronauta.
Mantiene los frenos de la serie 695, es decir, unos Brembo de 305 mm delante y de 240 mm detrás. Las llantas son de 17 pulgadas y los asientos deportivos corren por cuenta de la casa Sabelt, que los ha fabricado en exclusiva para el modelo con el nombre de Abarth Corse y llevan el respaldo de carbono.
Los faros son de xenón, y para encauzar un poco a los clientes en la personalización absoluta de su coche, dan a elegir como punto de partida dos variantes específicas: la Marchio y la New Wave. La Marchio homenajea a los coches que han hecho historia deportiva dentro de la marca, mientras que la New Wave se inspira más en el mundo moderno. Esta vez, creo que el sobrecoste se va a disparar bastante más de los 5.000 euros.