A nadie se le escapa que el mercado de los coches de segunda mano está ganando popularidad con el paso de los años. No son pocas las personas que deciden dar el paso y apostar por un coche que no acaba de salir de fábrica, sino que ha sido utilizado antes por otras personas.
El caso es que para acertar con la compra hay que tener en cuenta una serie de consejos como los que te contamos a continuación. Si estás pensando en dar el paso, te recomendamos tomar nota de todos y cada uno de ellos. ¿Empezamos?
Registro de mantenimientos y servicios
Una de las primeras cosas que deberías tener en cuenta tiene que ver con el historial del coche. Para conocerlo a fondo, no hay nada como recibir documentación que nos permita saber si el coche ha ido pasando los mantenimientos preceptivos y si ha sido necesario acudir al taller para llevar a cabo reparaciones. Evidentemente, dichos documentos deben ser auténticos para tener credibilidad.
Comprobar el kilometraje
Evidentemente, es uno de los aspectos más importantes a la hora de saber si un coche de segunda mano tiene mucho recorrido por delante o no. Por ello, hay que fijarse muy bien en el kilometraje y realizar algunas preguntas al vendedor, porque a veces un coche que ha recorrido pocos kilómetros puede estar en mal estado por culpa del desgaste en las partes de plástico y goma que produce la inactividad.
Revisión por un mecánico de confianza
Caranty tiene una gran variedad coches seminuevos con garantía y eso te da mucha tranquilidad. De no existir garantía, deberíamos concertar una revisión con un mecánico de confianza lo antes posible, ya que es la mejor forma de saber si el coche que nos interesa está en buen estado. Es cierto que es una inversión extra, pero es un dinero muy bien invertido porque evita disgustos.
Investigación sobre la marca y el modelo
Nunca está de más tener información extra sobre el modelo y la marca del coche de segunda mano que nos queremos comprar. Por ello, va bien tener en cuenta las opiniones de otros propietarios y conocer cuáles suelen ser los problemas más habituales, ya que eso nos permite fijarnos directamente en las partes que sabemos que pueden generar averías con mayor facilidad. Si hay fallos recurrentes que afectan justo al modelo que quieres comprar, lo mejor es que busques una alternativa más fiable.
Prueba de conducción
Siempre que sea posible, que como es lógico suele serlo, hay que realizar una prueba de conducción antes de dar el «sí quiero». Es la mejor forma de ver si todo está correcto y si no hay ruidos extraños. Es el mejor momento para ver si tanto los frenos como el embrague responden bien, para fijarse en las señales del tablero y para estar atento al funcionamiento de los componentes electrónicos. La transmisión, la aceleración y la suspensión también deben estar bajo lupa en esta prueba en la que también podemos poner a prueba la suavidad de la dirección.
Presupuesto realista
Por último, y no por ello menos importante, conviene tener claro cuál es el presupuesto que se puede invertir en la compra del coche seminuevo. Hay que ser realista y no querer gastar más de lo que uno debe gastar, pero tampoco hay que quedarse corto cuando se trata de una gran oportunidad.