MINI está de celebración por lo que ha sucedido en la planta de producción que tiene en Oxford, de donde ha salido la unidad número 10 millones para asombro de los pocos que tuvieron la suerte de asistir al nacimiento de una nueva marca hace algo más de seis décadas.
Sir Alec Issigonis, el encargado de diseñar el MINI clásico, no sabía por aquel entonces que su modelo, sin demasiados cambios a nivel estético con el paso de los años, pasaría a ser un icono de la industria de la automoción.
Un coche que siempre ha sido especial
Por aquel entonces el MINI ya podía ser considerado como un coche especial, ya que llevaba el motor colocado de forma transversal en la parte delantera y la caja de cambios estaba justo debajo. Además de ser dinámicamente avanzado, ofrecía más espacio que la mayoría de urbanitas de la época y pesaba muy poco, así que era un coche práctico y divertido a partes iguales.
En la fábrica de Oxford, donde en 1959 se ensambló la primera unidad de MINI, hoy pueden decir que han dado vida a la unidad número 10 millones, que por cierto no es una unidad cualquiera. Se trata de la serie especial 60 Years Edition, que ha tenido el privilegio de marchar con otras 59 unidades en el cumpleaños de la marca que se celebró el pasado 11 de agosto recorriendo Oxford hasta llegar a Bristol.
Peter Weber, director de la planta de MINI en Oxford, no podía sentirse más satisfecho:
Ver al vehículo número diez millones de nuestra marca salir de la línea de producción, aquí en Oxford, fue un momento de orgullo para todos los empleados. Algunos de ellos tienen familiares que ya trabajaron en el MINI clásico en este mismo lugar.
Ahora ha arrancado una nueva era en la que por fin vamos a ver el primer MINI eléctrico de la historia. ¿Les irá igual de bien que hasta ahora?