Cómo se nota que los suizos no tienen problemas para llegar a fin de mes. De lo contrario nadie entendería una elección tan sibarita como la que hemos conocido recientemente. Resulta que la policía de Basilea jubilará las unidades diésel que forman parte de su flota para conducir el lujoso Tesla Model X-100D, una decisión que justifican alegando motivos medioambientales.
Precio más caro, mantenimiento más barato
También hablan de lo económicos que son a largo plazo por el ahorro de combustible que experimentarán, aunque no dicen nada de lo mucho que cuesta hacerse con una sola unidad del SUV de la firma californiana.
En la nota de prensa facilitada a los medios de comunicación, la institución policial informa de que se han llevado a cabo minuciosos análisis para considerar las ventajas y los inconvenientes de conducir un SUV eléctrico como vehículo policial. Aunque cada uno de ellos cuesta unos 60.000 euros más que los vehículos diésel actuales, consideran que es una buena inversión.
Su autonomía no será un problema
Antes de tener que soportar un aluvión de críticas relacionadas con la autonomía, han querido dejar claro que sus coches suelen recorrer unos 200 kilómetros al día, mientras que la autonomía Model X es de 500 kilómetros.
Comparado con los vehículos empleados hoy en día, el Tesla Model X es más caro de comprar (140.000 francos en lugar de los 90.700 francos presupuestados), pero sus costos de operación y mantenimiento son mucho menores, y el valor de reventa significativamente más alto.
En Canadá también han llegado a un acuerdo con Tesla
En Canadá, concretamente en la Policía Provincial de Ontario, también veremos al Model X patrullando con los colores de la policía. Eso habla de lo mucho que se están implicando algunos países en el desarrollo de la movilidad eléctrica, cosa que en España todavía no podemos decir.