Opel saca músculo presumiendo de lo bien que le ha ido con el Insignia GSi en Nürburgring. El sedán deportivo ha sido capaz de pulverizar los registros del anterior Insignia OPC, que completó una vuelta rápida en el circuito alemán empleando doce segundos más.
Gasolina o diésel
La culpa la tiene su motor 2.0 Turbo de inyección directa, un gasolina que entrega 260 CV de potencia para que las prestaciones sean más que decentes.
El modelo en cuestión, que es 160 kilos más ligero que el Insignia OPC al que va a jubilar, se beneficia de la tracción total inteligente para ofrecer un perfecto reparto vectorial del par, algo que sirve para mejorar su comportamiento y evitar el odioso subviraje.
Las llantas de aleación son de 20 pulgadas de diámetro y van montadas en unos neumáticos Michelin Pilot Sport 4 S, así que el agarre está garantizado. Los frenos son de la casa Brembo y los amortiguadores son ajustables, mientras que el motor y la caja de cambios funcionan a las mil maravillas cuando está activado el modo Sport. Es la mejor opción para mover su chasis deportivo, aunque también se puede emplear el modo Standard para viajar con más calma por ciudad.
Consumos y emisiones
Este Insignia GSi consume una media de 8,6 l/100 km y emite 197 g/km de CO2. Eso con el motor de 260 CV, porque también existe la posibilidad de decantarse por el propulsor 2.0 diésel BiTurbo que desarrolla 210 CV y 480 Nm de par máximo. En este caso el consumo mixto es de 7,3 l/100 km y las emisiones de 192 g/km de CO2.
Berlina de cinco puertas o familiar
El Insignia GSi estará disponible muy pronto en los concesionarios de Opel en España. Se venderá con carrocería de cinco puertas y con carrocería familiar, en cuyo caso adopta el nombre de Insignia GSi Sports Tourer.
Artículo relacionado: Opel Insignia Grand Sport GSi y Sports Tourer GSi: los más rápidos de la gama