Al grupo VAG debería salirle muy caro todo esto. Resulta que no solo estaban trucando sus motores diésel para declarar menos emisiones, sino que Audi también hizo de las suyas trucando las cajas de cambio automáticas con la misma finalidad.
La California Air Research Board (CARB), un organismo encargado de velar por la sostenibilidad, destapó la semana pasada un nuevo episodio de un escándalo que no parece tener fin. Al principio se especuló con que no era más que una información falsa, pero Volkswagen envió un correo al diario Sueddeutsche Zeitung reconociendo que era verdad.
¿Por qué no dijeron nada?
Lo que no entiendo es por qué nadie dijo nada al respecto cuando les pillaron con las manos en la masa. Pidieron perdón y dijeron que trabajarían con las autoridades para aclarar todo lo ocurrido, pero nadie habló de lo que habían hecho con las transmisiones automáticas de Audi.
Los modelos de Audi equipados con cambio automático tienen la tecnología para alterar las emisiones cuando están sometidos a pruebas.
Tan tramposos como Volkswagen
Eso significa que no hay que echar toda la culpa a Volkswagen. Los propietarios de la marca de los cuatro aros también se dejaron seducir por las artimañas de su socio, del que aprendieron a trucar las emisiones de CO2 y los óxidos de nitrógeno.
Lo que hicieron fue modificar el software para que esas cajas de cambio automáticas fueran capaces de modificar su comportamiento cuando se encontraban ante una prueba de conducción que sirve para homologar consumos y emisiones.
Los modelos afectados montaban el motor V6 asociado a la transmisión automática. El A6, el A8 o el Q5 eran capaces de saber si se enfrentaban a una prueba de conducción gracias a la dirección del vehículo. En un uso cotidiano la caja de cambios no se comportaba ajustando el cambio de marcha en el momento óptimo, cosa que sí pasaba cuando estaba ante una prueba.
Pintan bastos para Audi
La semana que viene tendrán que dar explicaciones. Las lagunas legales que hay en Europa les pueden salvar, pero en Estados Unidos me temo que lo van a tener crudo. Allí ya se especula con la marcha de Volkswagen, que podría ser reemplazada por Skoda, y quién sabe si Audi se sumará a esos rumores tras este nuevo escándalo que no es más que un ejemplo de lo tramposas que pueden llegar a ser algunas empresas con tal de engordar su cifra de negocios.
¿Será este el último episodio turbio del grupo VAG o habrá más historias para no dormir?